16 semanas de embarazo

Para obtener información sobre las semanas 16 a 19 de un embarazo gemelar o múltiple, da clic aquí.

Notarás la «vivificación» pronto (la primera patada), lo que significa que tu bebé está creciendo fuerte y coordinado. El estreñimiento y las venas varicosas podrían estar haciendo que tu vida sea incómoda, y en tu próxima cita con el médico, es hora de comenzar a pensar en pruebas prenatales si aún no lo has hecho.

¿Cómo está tu bebé?

De unas 4 pulgadas de largo, del tamaño de un pepinillo, y con un peso de 4 onzas, tu bolita se hace cada vez más grande. Las orejas que se han estado moviendo a los lados de su cabeza (a donde pertenecen) en las últimas semanas se han desarrollado lo suficiente como para que él probablemente pueda escuchar todos los sonidos que tu haces, lo cual es otra forma en que el se prepara para la vida después de su gran llegada. Y aunque sus párpados todavía están sellados, han madurado y se han desarrollado lo suficiente como para detectar la luz a través de tu vientre.

Puede que sientas a tu pequeñín patear por primera vez pronto, un evento conocido como la «vivificación.» Si la realidad de tu embarazo aún no se ha asimilado, ciertamente lo hará después de que sientas que tu bolita de alegría golpea la puerta. Por otro lado, si éste es tu primer embarazo, es posible que no sientas al bebé patear durante unas semanas más, así que si aún no sientes ningún «avivamiento», no te preocupes. ¡Es totalmente normal que tarde un poco más!

¿Cómo está mamá?

Esperar esa primera patada puede causar mucha ansiedad a las futuras mamás, y muchas identificarán erróneamente otro movimiento interno como el bebé. No te preocupes si tienes un momento de confusión – incluso si has estado embarazada antes, todos los embarazos son diferentes, y lo que fue fácil de decir una vez podría tomarte desprevenida una segunda vez. Esos primeros movimientos pueden sentirse como una gran variedad de cosas, desde un revoloteo como de mariposas, hasta gas y palomitas de maíz.

El mismo aumento del flujo sanguíneo que está ocupado manteniendo la circulación en tu cuerpo en crecimiento, cambiando y preparándolo para amamantar va a seguir contribuyendo al aumento de la secreción vaginal, así como a la congestión nasal. También puedes notar estreñimiento y la aparición de venas varicosas. Tu espalda también puedes empezar a doler pronto, ya que ese bulto de bebé que está creciendo está cambiando tu centro de gravedad y forzando tu espalda hacia adelante. Cuando se desarrolla, el dolor de espalda es un síntoma que no es probable que se disipe en ningún momento durante el embarazo, ya que el útero sólo se está agrandando hasta que des a luz. Sin embargo, conseguir una almohada para el embarazo para que te apoye mientras duermes de lado puede ayudar a aliviar algo de la incomodidad.

Ahora también es el momento de las pruebas médicas que pueden determinar si todo va bien con tu chiquitín. Estos incluyen ecografías simples, pruebas de marcadores múltiples (MMT) de tu sangre, y si alguno de ellos levanta alguna bandera roja, una amniocentesis, que es un procedimiento altamente invasivo que involucra un bajo riesgo de aborto espontáneo. No todas las mujeres se someten a una amniocentesis, pero algunos proveedores de atención médica las recomiendan a aquellas que tienen una edad materna avanzada u otros factores de riesgo, o a aquellas cuyas pruebas de detección les preocupan. Aún así, cada embarazo es diferente, y puede ser útil y tranquilizador tratar de averiguar todo lo que puedas sobre la salud y el desarrollo único de tu bebé.

---