Para muchos, el café no sólo forma parte de la rutina diaria – es también un estilo de vida. Millones de personas afirman que toman café en la mañana (en la tarde y en la noche, e incluso a veces a la medianoche), para ayudar a mantenerlos concentrados y con energía; pero durante el embarazo, muchas madres deciden reducir su consumo de cafeína. Entonces, ¿Con qué se podría comparar tan deliciosa bebida en el mundo?.. Bueno, eso depende.
Debido a la rutina de tomar café, así como los efectos que causa, durante el embarazo, muchas luchan por limitar su consumo y no sobrepasar la cantidad recomendada de cafeína diaria que son 200 mg al día, equivalente a una taza grande de café regular en el día. Esto mismo aplica para aquellas otras fuentes de cafeína como el té negro o verde, sodas ó chocolate, por eso, permanecer bajo este límite definido, va a ayudarte a no quitarlo por completo de tu dieta y por el contrario, podrás continuar disfrutándolo en tu rutina normal. Sin embargo, aunque nada volverá a llenar completamente el lugar del café en el corazón de aquellos fieles amantes de este alimento, vale la pena probar con algunas sustituciones temporalmente.
¿Por qué se limita la cafeína durante el embarazo?
La euforia que proporciona el café proviene justamente de su contenido de cafeína. Desafortunadamente, la cafeína también hace que los vasos sanguíneos se contraigan, lo que reduce la cantidad de sangre que se desplaza para el feto. Este cambio en el flujo sanguíneo puede ser peligroso, y es por eso que es importante el consumo moderado de cafeína durante el embarazo.
Sustituir el habito de tomarse un café depende en gran medida del papel que este desempeña en tu vida, así que piensa por qué te gusta el café?, antes de buscar otras alternativas.
Si te gusta el café por: Su calor
Sostener una bebida caliente en tus manos puede ser muy reconfortante en una mañana fría. Si todo lo que anhelas es una bebida humeante, tienes un par de opciones para estos próximos meses:
- Té de hierbas: Consulta con tu médico acerca del té de hierbas que puedes consumir durante el embarazo, por lo general, contienen hierbas benéficas como la hoja de frambuesa roja. Desafortunadamente, el té que no es de hierbas, por lo general, tiene cafeína, así que es mejor limitar su consumo durante el embarazo.
- El agua caliente con limón y melaza: También podrías intentar beber agua caliente con medio limón y una cucharada de melaza, el cual contiene una abundante dosis de hierro, calcio y magnesio, entre otros nutrientes.
- El café descafeinado: Mientras que el café descafeinado tiene todavía algo de cafeína, por lo general tiene una cantidad mucho más pequeña que el café regular – alrededor de 13 mg por taza, dependiendo de la marca.
Si te gusta el café por: El hecho de que te despierta
Mucha gente tiene dificultad para despertarse por la mañana y nunca es fácil despertarse por si solo después de una noche placentera. En lugar de beber una taza de café por su efecto energizante, prueba algunas de las siguientes opciones:
- Enciende muchas luces temprano en la mañana como sea posible y fíjate si la luz te despierta.
- Toma una ducha de agua fría – está garantizado que descarga tus sentidos y te ayuda a sacudir el sueño.
- Come una manzana. El cuerpo obtiene energía a partir de una mordida de azúcar natural.
Si te gusta el café porque es parte de tu rutina en la mañana
- Ve a dar un corto paseo. El aire fresco y el ejercicio pueden ser estimulantes y de seguro, te darán ese impulso para comenzar el nuevo día.
- Estiramiento. El estiramiento hace que tu sangre fluya, lo cual ayuda a que tu cuerpo sea ágil y se recupere después de horas de inactividad. Incluir el estiramiento en tu rutina de la mañana puede construir un hábito de vida muy sano.
Si te gusta el café por: Su estrecha amistad con tus intestinos
Hey, estamos ahí contigo! La cafeína que está contenida en el café es un estimulante muy eficaz y puede ser un gran alivio para aquellos de nosotros que somos consumidores crónicos. Pero puedes estar segura de que hay otras alternativas. Estas son algunas opciones por las que puedes reemplazar 3 tazas de café con 1 taza de cualquiera de los siguientes:
- 1 taza de agua caliente y 1 limón: Exprime el limón en el agua caliente. El ácido cítrico puede estimular a los intestinos y el agua caliente te abastece de agua para que puedas suavizar las cosas con eficacia.
- 1 cucharadita de melaza: Puedes adicionarla en una taza de agua caliente o té caliente. La melaza es muy útil sobre todo durante el embarazo, ya que contiene muchos minerales y vitaminas, uno de los cuales es el magnesio, que te ayuda a hacer digestión.
- 1 cucharada de aceite de linaza en el té: El aceite ayuda a hacer las cosas un poco más, digamos, sueltas, lo cual puede ocasionarte un viaje inmediato al baño.
Podría parecer que cada día en el que trascurre el embarazo, se necesitara de múltiples tazas de café para alimentar esos pasos. Pero la mayoría de las mujeres pueden ser capaces de construir una nueva rutina y adaptarse a nuevos hábitos. Es posible que te pierdas el café de todas las mañanas durante unos meses. ¿Pero quién sabe? Si le ves el lado positivo, puede que encuentres una nueva rutina en la mañana que te guste y a lo mejor, la mantengas por el resto de tu vida.
Sources
- «Ch. 17: Nutrition During Pregnancy.» ACOG. American College of Obstetricians and Gynecologists, Apr 2015. Web.
- «Guideline: Food Safety for Pregnant Women.» FDA. USDA, Food Safety and Inspection Service, HHS, Food and Drug Administration, Jan 18 2017. Web.
- Mayo Clinic Staff. «Caffeine: How much is too much?» MayoClinic. Mayo Foundation for Medical Education and Research, Mar 8 2017.
