El objetivo principal de cualquier juego de mesa es divertirse y relacionarse con la familia o los amigos, pero muchos juegos diseñados para niños tienen pequeños y furtivos componentes educativos que ni siquiera se notan. Un juego puede parecer una actividad divertida, pero puede implicar contar, emparejar, agrupar o reconocer números, formas o colores. También puede haber otros beneficios como mejorar la coordinación entre la mano y el ojo, la destreza manual, las habilidades de escucha y memoria, y las habilidades para concentrarse y seguir las reglas.
No hay una tonelada de juegos de mesa familiares diseñados para incluir a niños menores de 3 años, pero a la edad de tu pequeño, la competencia en los juegos de mesa no es exactamente feroz, el ganador no va a importar, y las reglas no son súper importantes. Por eso, puedes convertir muchos juegos en juegos apropiados para la edad de tu niño saltando algunas de las reglas más complicadas o sacando cartas de la baraja que hacen el juego más difícil. ¡Entonces pueden concentrarse en divertirse y aprender a lo largo del camino!
- Candy Land: Saca algunas de las cartas más complicadas si tienes una versión anterior (la última edición sólo tiene un spinner), y este juego le puede ayudar a tu peque a aprender los colores ¡y divertirse tomando turnos y siguiendo instrucciones!
- Memoria:Memoria permite a los jugadores elegir las cartas que están boca abajo en un tablero, voltearlas e intentar encontrar la otra carta que coincida en el grupo. Como su nombre indica, es ideal para desarrollar y mejorar las habilidades de memoria, así como para reconocer formas y colores, y si por casualidad no tienes el juego en casa, una baraja de cartas también puede funcionar en un abrir y cerrar de ojos.
- Uno: Uno es ideal para aprender colores y números, y eventualmente la estrategia puede incluso entrar en juego. Es posible que desees eliminar las cartas más complejas de «+4» y «Saltar» y limitarse a los colores y los números hasta que tu pequeño aprenda a jugarlo.
- Serpientes y Escaleras:Este juego se comercializa a partir de los 4 años, pero no requiere ninguna lectura, por lo que puede funcionar para tu pequeño. Las serpientes y las escaleras pueden ayudarlo a aprender los números, ¡y una interpretación del juego dice que puede empezar a enseñarle sobre las buenas obras! (Para refrescarte la memoria: las buenas acciones te dan una escalera hacia arriba, las malas te hacen que caigas más abajo en el tablero.
- Hi, Ho Cherry-O:Este juego de selección de cerezas puede ser una introducción temprana al conteo, a la igualación de colores y (si tienes la edición más reciente) a los rompecabezas. La nueva edición tiene diferentes tipos de fruta, así que tu pequeño puede aprender sobre cerezas, arándanos, manzanas y naranjas mientras practica el conteo (¡y tal vez incluso algunas habilidades matemáticas fundamentales!).
- Monopoly: De acuerdo, tu pequeño probablemente no esté listo para esto todavía, pero ustedes dos pueden jugar con el dinero, ¡para que tu hijo comience a aprender lo básico acerca de la moneda! O, ya sabes, trabajar en su destreza con papeles de colores.
Debido a que algunos de estos juegos son técnicamente para niños a partir de los 3 años, es posible que tengan partes pequeñas que son un peligro potencial de asfixia. Si tu y tu peque van a divertirse con uno de estos juegos, ¡asegúrate de tener cuidado con las cerezas pequeñas, los hombres de jengibre, etc! Y si tu niño no «le agarra el rollo» a un juego en particular de inmediato, no te preocupes. Puedes intentarlo de nuevo cuando sea un poco mayor o simplemente inventar las reglas a medida que avanzas. ¡La creatividad también es aprender!
Fuentes
- «The Benefits of Board Games.» Scholastic. Scholastic Inc. Accessed June 20, 2017. http://www.scholastic.com/parents/resources/article/creativity-play/benefits-board-games