A esta edad, la mayoría de los niños pasan de jugar junto a sus compañeros, en lo que se conoce como juego paralelo, a jugar juntos.
Si te has dado cuenta que tu pequeño se aleja de otros niños en el parque, o si el profesor ha mencionado que tu pequeño no se relaciona con los otros niños en la escuela, puedes preguntarte si tu pequeño está mostrando signos de timidez, o si es algo más.
Aquí hay algunos escenarios comunes que pueden causar preocupación.
- No se compromete verbalmente: Puede que tu peque hable mucho en casa, y probablemente entiendas mucho de su lenguaje, pero puede que se mantenga callado en entornos sociales. Podría ser timidez, o podría ser algo más. Tal vez está atrasado en el lenguaje expresivo y no se siente seguro en su capacidad de mantener el ritmo cuando se habla con sus compañeros. También podría estar batallando con el lenguaje receptivo, lo que significa que no entiende fácilmente lo que se le dice. En cualquier caso, tu pequeño puede empezar a sentirse abrumado a la hora de socializar como resultado de un retraso en el lenguaje y por lo tanto puede resultar más fácil para él retraerse.
- Mostrando malestar físico: Las personas tímidas pueden tener problemas para relacionarse socialmente o prefieren pasar tiempo a solas. Sin embargo, las personas con problemas de socialización pueden mostrar signos externos más evidentes. Si tu pequeño parece sonrojarse, tartamudear o incluso temblar cuando se enfrenta a tener que socializar, es probable que esté experimentando ansiedad social, en lugar de sólo un poco de timidez.
- Actuando: Cuando se enfrenta a una situación que preferirían evitar, muchos niños pequeños tienden a actuar, lo que puede presentarse de muchas formas. Pueden hacer berrinches cuando se les pide que saluden a un compañero de clase o incluso actuar agresivamente hacia sus compañeros en situaciones sociales. Esto no es necesariamente un signo de un problema de comportamiento subyacente, sino que puede ser su manera de tratar de evitar situaciones sociales que hacen que se sientan incómodos.
Lo que puedes hacer para ayudar
Es difícil llegar a la raíz del comportamiento de un niño pequeño por sí solo, especialmente porque en este punto, tu hijo pequeño probablemente está haciendo la mayor parte de su socialización en casa con la familia. Así que puedes empezar a reunir información de fuentes externas, como su maestro o cuidador de niños, sobre cómo interactúa con sus compañeros cuando no estás cerca. Si parece que el tema puede ir más allá de la timidez general, puedes empezar por consultar con su pediatra sobre lo que has notado y, si te preocupa, consulta con un especialista sobre el mejor enfoque para ayudar a tu pequeño a lidiar con las situaciones sociales.