Si tu pequeño está pasando por una fase en la que ama los dinosaurios, estás tratando de fomentar su amor por la ciencia, o los dos creen que una gelatina verde suena muy sabrosa ahora mismo, hay una actividad con la que es difícil equivocarse, ¡y es la arqueología de la gelatina!
La arqueología de la gelatina es el fino arte de sumergir algunos de sus juguetes favoritos en una deliciosa gelatina de colores y sabores. A partir de ahí, tu pequeño puede usar sus dedos, algunas herramientas arqueológicas de última generación (como un tenedor y una cuchara), o incluso su boca (siempre y cuando los juguetes sean lo suficientemente grandes como para suponer un peligro de asfixia) para sacar los juguetes.
Si quieres ir a por un tema fósil completo, usando animales de plástico, dinosaurios, o incluso fósiles simulados para la actividad, puedes empezar hablando con tu pequeñín sobre cómo los animales y plantas antiguos pueden ser preservados durante miles de años antes de dejar a tu pequeño Indiana Jones suelto en ese azúcar gelatinoso. Y si quieres saltarte la lección de cómo los fósiles llegan a ser, es simplemente una divertida actividad sensorial que le permite causar un poco de desorden, ¿y a qué niño pequeño le encantaría eso?
Preparando tu propio sitio arqueológico de gelatina
- Empieza por conseguir dos paquetes de gelatina (o consigue uno y divide los ingredientes por la mitad antes de empezar).
- Escoge los juguetes que se van a sumergir, y asegúrate de que estén limpios. Aunque comer la gelatina no sea el principal objetivo del proyecto, hay una buena posibilidad de que algunas de ellas se abran camino a su boca. El agua caliente y el jabón para platos deberían ser suficientes para que los fósiles de tus juguetes estén bien limpios.
- Haz la mitad de tu gelatina, ponla en un tazón dos veces más grande que el primer lote de gelatina y enfríala hasta que esté sólida.
- Una vez que el primer lote de gelatina esté sólido, agrega tus selecciones de juguetes al tazón. Los juguetes deben descansar sobre la gelatina fría.
- Haz el resto de la gelatina. Cuando esté caliente y aún no se haya formado, vierte este segundo lote de gelatina sobre los juguetes y el primer lote de gelatina.
- Enfría la gelatina por segunda vez, hasta que esté sólida.
- ¡A excavar!
La arqueología de la gelatina puede no ser una actividad práctica diaria, hay todo ese azúcar involucrado, para empezar. Como un regalo de vez en cuando, sin embargo, cavar en un poco de gelatina con tu pequeño ¡puede ser una gran manera de tener algo de diversión llena de fósiles!
