Aunque su nombre pueda asustar, la enfermedad de manos, pies y boca es una enfermedad muy común en la niñez que rara vez causa problemas graves o duraderos. Llamada así por la erupción que el virus provoca en las manos y los pies de los niños, esta enfermedad es muy contagiosa y se propaga con facilidad, en particular durante el verano y el otoño en niños menores de cinco años.
Hacer un seguimiento de todos los virus e infecciones a los que pueden estar expuestos los niños puede resultar abrumador para padres de familia y cuidadores. En lo que respecta a los virus y las enfermedades infantiles, la enfermedad de manos, pies y boca no es algo que te quite el sueño. Es mas o menos leve, de corta duración y fácil de prevenir con muchas de las mismas conductas que aprendimos durante la pandemia de COVID-19.
¿Qué causa la enfermedad de manos, pies y boca?
En la mayoría de los casos, un grupo de virus llamado virus coxsackie causan la enfermedad de manos, pies y boca. No es la misma enfermedad que infecta al ganado y otros animales (a veces llamada enfermedad de los cascos y la boca). Los humanos no pueden contraer la enfermedad animal y los animales no pueden contraer la enfermedad humana.
Al igual que los resfriados y la gripe, hay diferentes versiones o tipos del virus que pueden causar la enfermedad de manos, pies y boca. Esto significa que puede contraerse más de una vez, razón de más para aprender a prevenirla.
Los virus que causan la enfermedad de manos, pies y boca pueden propagarse en la saliva y las gotitas de la boca, nariz y garganta, así como a través de las heces (por ejemplo, si no te lavas las manos del todo después de cambiar el pañal a tu bebito). El virus puede propagarse al compartir vasos, llevarse juguetes a la boca, dar besos y hablar de cerca con alguien infectado.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas suelen aparecer de 3 a 6 días tras la infección inicial (exposición a otra persona con enfermedad de manos, pies y boca). Los primeros síntomas que se suelen notar son pérdida de apetito, malestar general y, luego, fiebre y dolor de garganta. Otros síntomas son:
- llagas o ampollas dolorosas en la boca (encías, lengua e interior de las mejillas);
- erupción en las palmas de las manos o las plantas de los pies;
- erupción en las nalguitas (menos frecuente);
- fiebre;
- dolor de garganta;
- malestar;
- pérdida de apetito;
- inquietud o irritabilidad en bebés y niños pequeños.
Como ocurre con la mayoría de los virus, es posible que solo presente algunos de estos síntomas, pero no todos. Cada niño puede tener síntomas diferentes, y algunos pueden enfermar más que otros. La enfermedad de manos, pies y boca suele ser una enfermedad leve y debería empezar a sentirse mejor en pocos días. Durante la recuperación puede producirse descamación de la piel, y aunque tiene un aspecto extraño no es dolorosa ni preocupante.
¿Cómo se trata el virus?
Al igual que otros virus, no existen medicamentos ni antibióticos para tratar o curar la enfermedad de manos, pies y boca. Existen algunos medicamentos y tratamientos que pueden ayudarle a sentirse mejor si se infecta:
- Analgésicos de venta libre, como ibuprofeno (Advil) o paracetamol/acetaminofén (Tylenol) si tiene fiebre o llagas dolorosas en la boca. Sigue las instrucciones de dosificación del envase según la edad y el peso.
- Gel cutáneo de aloe si la erupción cutánea produce picor o molestias.
- Beber mucho líquido para mantener la hidratación.
- Alimentos blandos, sopas, yogures, paletas y batidos pueden ayudar a aliviar el dolor de boca.
- Evita las bebidas y alimentos que puedan irritar las llagas bucales (bebidas ácidas como el jugo de naranja, alimentos salados, picantes o calientes).
- Si tiene edad suficiente, haz que se enjuague la boca con agua tibia después de comer.
¿Debo acudir al proveedor de atención médica?
No. En general, no es necesario que acudas a un proveedor de atención médica. Esto es en particular cierto si sabes que pueden haber estado en estrecho contacto con alguien que tenga el virus. Hay algunos casos en los que puede ser conveniente consultar a un proveedor de atención médica, por ejemplo:
- Es menor de seis meses.
- Tiene un sistema inmunitario debilitado.
- Tiene llagas en la boca o dolor de garganta que hace que le duela beber líquidos.
- Los síntomas no mejoran después de 10 días.
- La fiebre dura más de 3 días.
- Necesitas ayuda para diagnosticar la enfermedad.
¿Puedo contagiarme con la enfermedad de manos, pies y boca de mi hijo o hija?
Sí, aunque no con facilidad. Los adultos suelen tener un sistema inmunitario más fuerte, por lo que es menos probable que se infecten. También nos lavamos mejor las manos y no nos llevamos tanto a la boca como los niños pequeños. No obstante, conviene intensificar la rutina de lavado de manos, sobre todo cuando cuides a tu pequeñín y después de cambiarle los pañales.
¿Tengo que dejarle fuera de la guardería, la escuela u otras actividades?
Tal vez. Cada escuela, guardería o cuidador puede tener sus propias normas, pero en general, mientras no tenga fiebre, pueda controlar la baba/evite llevarse cosas a la boca y parezca encontrarse bien, puede volver a la escuela o estar con otros niños. Sabemos que los niños pueden propagar la enfermedad de manos, pies y boca desde el día antes que aparezca la erupción y durante varios días después de que aparezca, pero no sabemos con exactitud cuándo dejan de ser contagiosos.
¿Cómo puedo evitar que se enferme?
- Lavarse las manos con frecuencia (el tiempo suficiente para poder cantar «Cumpleaños feliz», utilizando suficiente jabón para cubrir todas las superficies de las manos y las muñecas, haciendo espuma y frotando todas las superficies de las manos, las yemas de los dedos, las uñas y las muñecas).
- Evitar el contacto de cerca (respetar la regla de los seis pies o la longitud de una bicicleta de adulto de distancia) con cualquier persona que padezca la enfermedad de manos, pies y boca.
Dado que la enfermedad de manos, pies y boca es tan contagiosa, es importante que informes a otras personas y niños con los que haya estado de que padece esta enfermedad. Esto incluye a otros cuidadores, la guardería o la escuela.
No debes avergonzarte de que tenga la enfermedad de manos, pies y boca, es muy contagiosa y difícil de evitar. Aprender más sobre lo leve y frecuente que es esta enfermedad infantil y cómo prevenir su contagio leyendo esta hoja informativa te ayudará a hablar con más confianza con otros padres de familia o cuidadores.
Fuentes
“Hand-foot-and-mouth-disease.” Mayo Clinic. Mayo Clinic. August 16, 2022. https://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/hand-foot-and-mouth-disease/symptoms-causes/syc-20353035
“Hand-foot-and-mouth-disease (HFMD).” CDC. CDC. February 2, 2021. https://www.cdc.gov/hand-foot-mouth/index.html
“What to do if your child has hand, foot, and mouth disease?” Children’s Hospital of Philadelphia. Children’s Hospital of Philadelphia. May 17, 2022. https://www.chop.edu/news/health-tip/hand-foot-and-mouth-disease-what-you-need-know