Como tu útero se expande para acomodar a tu bebé en crecimiento, algunas molestias abdominales son normal. Puede que experimentes dolores sordos o agudos en los costados, en el inferior o sobre todo tu abdomen. Aquí hay algunos de los tipos y causas de dolor abdominal durante el embarazo, además de consejos para el alivio.
¿Cómo se siente por lo general el dolor abdominal?
El dolor abdominal asociado con el embarazo puede sentirse sordo, persistente, palpitante, pulsante o agudo, y puede suceder en pequeños brotes o persistir durante largos períodos de tiempo. También puede ser peor en un área de tu cuerpo, como los costados de tu estómago.
¿Qué lo causa?
Hay algunas razones diferentes para estas sensaciones incómodas. La mayoría del malestar abdominal tiene causas normales. Una causa común de dolor es el estiramiento de los ligamentos redondos ubicados en ambos lados del abdomen, los cuales sostienen el útero. Estos músculos comienzan en la parte superior del abdomen y continúan hasta la ingle. Mientras el feto crece en tu útero, el tejido conectivo se extiende y hace que el ligamento se tense repentinamente, trayendo dolores agudos. Otras razones típicas es que los dolores y molestias incluyen estreñimiento, reflujo ácido, gas, contracciones de Braxton-Hicks y la acumulación de tejido endometrial (el revestimiento interno de tu útero) que normalmente se pierde durante tu período.
Sin embargo, hay algunas causas de dolor abdominal relacionado con el embarazo que puede indicar complicaciones. Si otros síntomas inusuales acompañan al dolor abdominal, incluyendo sangrado abundante, dolor de espalda, hinchazón del cuerpo, fiebre, vómitos persistentes, dolor al orinar, o si el dolor es tan intenso que se convierte en debilitante, ponte en contacto con tu proveedor de atención médica.
Consejos para sentirte mejor
Si estás sufriendo de dolores abdominales, prueba los consejos a continuación para un alivio:
- ¡Toma asiento! El sentarte con los pies para arriba puede ser la mejor medicina para este síntoma incómodo.
- Evita movimientos bruscos, especialmente en tu tercer trimestre. Cuando tu abdomen se estira al máximo, los movimientos rápidos pueden causar que tus músculos y tendones se tensionen. Muévete con cuidado para ayudar a tu cuerpo adaptarse.
- No sobrecargues un músculo dolorido. Si algo te duele, trata de inclinarte sobre ello para liberar la tensión muscular. El estiramiento puede llegar a hacerlo sentir peor.
- Usa una compresa caliente sobre lo adolorido. Ayuda a llevar más sangre a la zona, lo cual reduce la inflamación y rigidez muscular.
- Haz ejercicios abdominales para mantener tus abdominales fuertes durante todo el embarazo. Escucha a tu cuerpo, sin embargo: si algo duele más de lo normal durante el ejercicio, disminúyelo.
- Si estos consejos no ayudan o si los dolores llegan a ser más agudos, comunícate con tu proveedor para más asesoramiento.