El edema, comúnmente conocido como inflamación, cuando el exceso de líquidos se acumula en los tejidos, es muy común durante el embarazo y a menudo afecta los pies y tobillos, haciendo el moverse un poco difícil o doloroso. El edema de los pies y tobillos es más común durante el tercer trimestre y se desvanece bastante rápidamente después del parto, ya que tu cuerpo se deshace de todo el exceso de líquido. La leve hinchazón en los pies y manos es perfectamente normal, pero la hinchazón excesiva o repentina podría ser una señal de preeclampsia, por lo que debes buscar consejo médico si notas cualquier hinchazón extrema.
¿Qué lo causa?
Hay una serie de factores que podrían contribuir al edema en las futuras mamás. Las mujeres embarazadas retienen más agua de lo habitual, y su útero creciente aplica presión sobre las venas pélvicas y la vena cava, lo cual resulta en menor flujo de sangre de vuelta a las piernas, y acumulación de líquido cerca de tus pies.
¿Consejos?
Porque la hinchazón es simplemente líquido acumulándose en tus venas, es importante mantener tus pies hinchados elevados, por encima de tu corazón- esto podría ayudar a drenar parte de la sangre de vuelta a tu corazón. El hacer ejercicio e, irónicamente, el tomar agua pueden ayudar a tu cuerpo a tratar la hinchazón en los pies. Los calcetines de compresión y la disminución de la ingesta de sodio también pueden ser beneficiosos. Si no es demasiado doloroso, el ejercicio también puede ayudar con las molestias.
Fuentes
- N A Segal, E R Boyer, P Teran-Yangle, N Glass, H Hillstrom, H John Yack. «Pregnancy Leads to Lasting Changes in Foot Structure.» American Journal of Physical Medicine & Rehabilitation. 92(3): 232-240. Web. 3/13/2015.
- Roger W. Harms, M.D. «What causes ankle swelling during pregnancy – and what can I do about it?» Mayo Clinic. Mayo Clinic, 8/5/2014. Web.