Entre los 4 y los 6 meses tu bebé empezará a ser capaz de dormir durante más tiempo y, a los 6 meses, muchos bebés están listos para dormir toda la noche. Sin embargo, es completamente normal que algunos bebés tarden más en alcanzar este objetivo. Puedes ayudar a tu bebé a dormir más tiempo por la noche poniéndolo en la cuna mientras está tranquilo y relajado pero aún despierto, en lugar de arrullarlo hasta que se duerma. Esto ayudará a que aprenda a volverse a dormir solo si se despierta en medio de la noche sin necesitar que estés allí para arrullarlo. Intenta ser paciente. Todos los bebés se desarrollan a su propio ritmo y estarán listos para dormir toda la noche a su propio tiempo. De acuerdo con la Fundación Nacional del Sueño, entre el 70 y el 80% de los bebés duermen toda la noche a los 9 meses, pero puede suceder tan pronto como a los pocos meses de edad, o tan tarde como al año.
¿Debo supervisar al bebé mientras está durmiendo?
Una cuna o guardería silenciosa puede parecer un gran avance, pero asegúrate de regresar a monitorear a tu bebé después de que la habitación se quede en silencio. A veces los bebés se duermen, pero a veces deciden pasar su tiempo libre practicando habilidades físicas como gatear o darse la vuelta. Puedes evitar esto asegurándote de que tu bebé tenga suficiente tiempo para realizar estas actividades durante las horas del día. Si notas que tu bebé ronca o tiene sibilancias después de dormirse, menciona esto al pediatra en el próximo chequeo, ya que la respiración irregular puede ser una señal de advertencia de la enfermedad de reflujo gastroesofágico (GERD).
Las ventajas de un bebé bien descansado
Dormir ayuda al cuerpo humano a curarse y crecer, así que quizás no sea una sorpresa que los médicos observen rutinariamente que los bebés bien descansados mejoran enormemente su capacidad para gatear, manejar objetos e incluso caminar. Una vez que tu bebé se adapte a un ciclo de sueño más prolongado, ¡podrás presenciar nuevos hitos en su desarrollo durante las siguientes semanas!