Es tentador quedar fascinado por las habilidades físicas más llamativas de los niños – aprender a caminar, o subir escaleras, o incluso simplemente caminar de espaldas sobre su trasero son logros emocionantes y dignos de ser grabados en vídeo que también tienden a distraer de todo lo demás al enviarle a usted a asegurarse de que las medidas de protección del bebé están a la altura de las nuevas circunstancias. Algunos de los movimientos que están desarrollando son literalmente más pequeños, como el movimiento del dedo pulgar pequeño y el dedo índice, están sentando las bases para sostener un lápiz o bolígrafo por el resto de su vida.
Esto no significa que la rapidez con la cual domine el agarre de la pinza tiene algo que ver con sus notas escolares eventuales, pero la forma en que desarrolle los pequeños músculos de sus manos será una parte crucial del proceso de aprender a escribir unos años más tarde, y el agarre de la pinza es un hito importante en ese desarrollo.
¿Qué es el agarre de la pinza?
El agarre de la pinza es el paso de desarrollo que viene después de que Bebé primero aprenda a recoger objetos pequeños – rastrillándolos hacia si mismo con sus dedos y luego recogerlos con su puño. Esta es la empuñadura que probablemente ha empezado a usar para autoalimentarse y para jugar con juguetes más pequeños. El agarre con pinzas que los bebés suelen desarrollar entre los 6 meses y el año de edad, aunque la mayoría de las veces ocurre a los 8 o 9 meses, es mucho más preciso, ya que permite a los bebés recoger objetos pequeños individuales entre su dedo pulgar y el índice o el dedo medio.
El agarre de la pinza es un primer paso importante hacia su eventual habilidad para escribir, y es una pieza del desarrollo de la motricidad fina que lo ayudará con muchas tareas que requieren un poco más de precisión un futuro cercano, desde la pulsación de botones hasta la autoalimentación.
¿Cómo puedo alentarlo?
Estrictamente hablando, Bebé está probablemente bien encaminado en su manera de desarrollar el agarre de la pinza solito y sin tu ayuda. Por otro lado, sin embargo, no sería mala idea apuntarlo en la dirección correcta, y si ya se alimenta por sí mismo, desarrollar el agarre de la pinza podría ayudar a mantener la hora de la comida un poco más ordenada, aunque también podría tomar un poco más de tiempo, por lo menos al principio.
Uno de los ingredientes claves para un buen agarre de pinza es el control muscular de Bebé y como el nombre lo sugiere, una de las mejores maneras de construir eso es practicar a señalar con Bebé. Dado que señalar es también un importante paso pre-verbal hacia la comunicación, puede que ya hayas empezado a señalar cosas a Bebé alentándolo a señalar contigo para mostrar, por ejemplo, cual página de su libro favorito tiene un gato o hacia cual coche se dirigen en el estacionamiento. También puedes ayudar sus destrezas de apuntar haciendo agujeros en la plastilina, o apretando botones en sus juguetes.
Otras actividades que estimulan el agarre de la pinza y ayudan a fortalecer los músculos necesarios para ello incluyen dibujar con crayones o marcadores (no te preocupes si no los sostiene sus herramientas de dibujo ‘correctamente’ aun), rociar cosas con una botella, o jugar con cualquier juguete blando que pueda apretar.
También es muy probable que Bebé empiece a usar el agarre de pinzas para recoger objetos pequeños, como por ejemplo, cheerios, si sólo tiene unos pocos de frente en lugar de una montaña de ellos.