La cuestión de ‘maneras de aumentar la fertilidad’ puede ser un poco delicada, especialmente cuando se trata de la fertilidad de tu pareja. La conversación puede sentirse como si estuvieras haciendo una acusación cuando, en realidad, todo lo que quieres hacer es mejorar tus probabilidades tanto como puedas. Según la Organización Mundial de la Salud, el 40% de los problemas que las parejas tienen para concebir se remontan a la fertilidad masculina, y aproximadamente el 20% de los hombres tienen una cuenta baja de espermatozoides, por lo que es una buena idea trabajar para aumentar su recuento de espermatozoides al mismo tiempo que tu estás tratando de maximizar tu fertilidad.
Animales, vegetales, minerales
Al igual que con tu cuerpo, lo que él come juega un papel importante en tu fertilidad. De hecho, ambos cuerpos se beneficiarán al agregar muchos de los mismos nutrientes a sus dietas, lo que significa que mejorar lo que come es algo en lo que pueden trabajar juntos. No tener suficiente ácido fólico, ácidos grasos omega-3 o vitaminas A, C, D, E o B12, zinc o selenio podría dañar su esperma, así como la salud de tus óvulos. Los antioxidantes que se encuentran en las frutas también pueden ayudar a ambos. ¡Una dieta equilibrada y un multivitamínico pueden ayudar mucho!
Sexo para hacer bebés, sin drogas, tu llamada en el rock’n roll.
Un estudio de 2003 muestra que fumar cigarrillos puede causar daño al esperma, y un estudio danés sugiere que beber alcohol regularmente puede disminuir el esperma, lo que hace que la combinación de los dos no sea muy buena para la fertilidad. Las drogas ilegales también pueden interferir con la fertilidad, además de otros riesgos para la salud. Debes hacerle saber estos hechos si crees que pueden estar contribuyendo a la dificultad para concebir.
Desestrésate para impresionar
Un estudio reciente en la revistaFertilidad y esterilidad sugiere que el estrés puede llevar a un menor contenido de espermatozoides. Algunos médicos recomiendan adoptar una rutina de ejercicio regular pero moderada para mantener el estrés bajo y saludable en el cuerpo, pero el camino hacia un menor estrés puede comenzar con algo tan simple como la respiración profunda diaria.
Hablar con tu pareja sobre tu fertilidad puede parecer una perspectiva aterradora, pero no tiene por qué serlo. Si un bebé es algo que ambos quieren, entonces necesitan estar cómodos comunicando sus preocupaciones para mejorar sus posibilidades.
