La mayoría de los métodos anticonceptivos vienen con la nota al pie de página de que, no importa cuán efectivos sean para prevenir el embarazo, no previenen las infecciones de transmisión sexual, y la comparación implícita es,no como los condones. Sin embargo, los condones tampoco son una cura para todo, y hay infecciones contra las cuales los preservativos no siempre protegen, incluso cuando funcionan perfectamente.
Piojos púbicos
Otras cosas que caen bajo el título de las infecciones de transmisión sexual (o STIs por sus siglas en inglés) son más aterradoras y peligrosas, pero no hay nada que suenepeor que los piojos púbicos. Y desafortunadamente, son una de esas cosas de las que el uso del condón no necesariamente te protegerá, ya que se pueden propagar a través del contacto no genital de piel a piel, e incluso, en raras ocasiones, a través de la ropa y ropa de cama muy infestada. Las relaciones sexuales mutuamente monógamas y la buena higiene personal de tu pareja sexual junto con el uso del condón pueden ayudar a reducir las probabilidades de contraerlas.
Herpes
El herpes genital puede transmitirse a través del contacto de piel a piel fuera del área genital que cubre el condón, y puede contagiarse de parejas sexuales que no tienen llagas visibles y, por lo tanto, es posible que no sepan que han sido infectadas. Los condones y las relaciones sexuales monógamas siguen siendo la mejor manera de evitar el herpes, así como la comunicación abierta con las parejas sexuales.
VPH
El VPH, o el virus del papiloma humano, puede permanecer latente durante años, pero también puede causar verrugas genitales o ciertos tipos de cáncer, con mayor frecuencia cáncer cervical. Puede infectar y luego transmitirse a través de partes de la piel que no están cubiertas por condones, y el uso de un condón definitivamente reduce el riesgo. Las vacunas contra el VPH también existen y ofrecen una probabilidad mucho mayor de evitar contraer el VPH que los preservativos por sí solos.
Sífilis
Al igual que el VPH y el herpes, la sífilis puede contraerse y transmitirse a través del contacto de piel a piel, ya sea en el área genital, contra la cual los condones protegen, y en el área alrededor de ella, contra la cual los preservativos no lo hacen. Esto significa que los condones siguen siendo una buena idea, pero no son una garantía contra el sífilis.
