¡Bienvenido al maravilloso mundo de tener un hijo de un mes! A medida que tu chiquitín continúa creciendo, tu vida sólo se volverá más y más llena de sorpresas, desde lo emocionante (¡primera vez que duerme toda la noche!), a lo extraño (¡el nueva pasatiempo de tu bebé es tirar cosas en la bañera!) hasta lo desagradable (¡el pañal de tu bebé que rebasa y ya vas tarde!). Sin embargo, has logrado llegar al primer mes de su vida – así que ya estás lista para cualquier cosa.
Una cosa que no debe ser una sorpresa es el hecho de que es tiempo del chequeo médico de un mes de tu chiquitín, si aún ambos todavía no han ido por uno. En esta visita, el pediatra pesará y medirá a tu peque, y le realizará un examen físico completo, revisará su corazoncito, sus ojitos, sus orejitas y todo lo demás que revisarías en un examen físico. Tu pequeñín probablemente también recibirá su segunda dosis de la vacuna contra la hepatitis B. También puedes utilizar este tiempo para hacerle cualquier pregunta que tengas al pediatra, no importa cuán grande o pequeña sea.
Es posible que alrededor de este tiempo, ya entres a un ritmo cuando se trata de la alimentación y sueño – estos horarios están más entrelazados de lo que piensas. A medida que tu bebé crece, también lo hace su estómago, lo que significa que podría dormir por períodos cada vez más largos cada noche. Esta energía adicional que tu bebé está recibiendo también le está ayudando a crecer más y más fuerte cada día. Durante el tiempo sobre su barriguita, puedes notar algunos aumentos en su fuerza – donde antes solía quedarse acostado sobre su estomago, ahora podría ser capaz de voltear su cabeza un poco, aunque sea solo por un segundo.
Hitos
- Primer chupete: Muchos bebés ya han estado usando el chupete durante un mes. Sin embargo, si tu pequeñín está amamantando exclusivamente, a menudo se recomienda esperar introducir el chupete hasta que cumpla un mes aproximadamente.
- Rastrea objetos moviéndose lentamente de lado a lado: Los bebés desarrollan muy bien su capacidad visual durante el primer mes de vida – a diferencia de antes donde solía tener muy poco control de sus ojos, pero ahora, es capaz de rastrear objetos que se mueven lentamente en frente de su cara.