Tu pequeñín puede ser bastante pequeño cuando lo miras junto a, digamos, un elefante o el Gran Cañon, o incluso junto a ti, pero en comparación cuando nació, tu bebé es enorme. En este punto, tu bebé es aproximadamente el doble del tamaño que era cuando nació.
Es una suerte para ti que alrededor de este tiempo, la tasa de crecimiento comienza a disminuir un poco -si sigue creciendo a este ritmo, vas a terminar pasando toda su infancia yendo y saliendo de las tiendas comprando ropa nueva- al menos hasta que fuese demasiado alto para atravesar las puertas.
Ahora que tu chiquitín no va a estar tan ocupado creciendo, es probable que quiera encontrar algunos nuevos pasatiempos con que ocupar su tiempo. Estos pasatiempos pueden incluir agarrar cosas, lanzar cosas, agarrar cosas que después tire, y crecer diente tras diente tras diente hasta formar su pequeña sonrisa de blancos perlados.
Tu chiquitín también está listo para otro chequeo, si todavía no lo ha tenido. En el chequeo de los 4 meses, el proveedor de atención médica lo pesará y medirá, le pondrá sus próximas vacunas y responderá cualquier pregunta que puedas tener sobre el crecimiento de tu bebé. Puesto que te estás acercando al momento de empezar a introducir los alimentos sólidos, puede ser un buen momento para que le preguntes al pediatra cualquier duda que puedas tener sobre eso, aunque todavía esté muy pequeño, y es probable que no vayas a necesitar esa información por un par de semanas más. Aún así, es bueno saberlo, por si acaso tu frijolito decide que mañana es un buen día para tomar la cuchara de tu mano y entrar al mundo de los alimentos sólidos.
Tu bebé continúa desarrollándose en un número de maneras emocionantes, desde lo físico, lo social, lo mental, y más allá. Definitivamente sabe quién eres en este momento, y puede mostrarlo – aunque por lo general tarda un poco más, casi cerca de los seis meses, algunos bebés comienzan a mostrar los primeros signos de ansiedad de separación en este momento. Si tu pequeñín se vuelve quisquilloso o no cuando te vas, está claro que está comenzando a gustarle la gente con la que pasa más tiempo.
Tu tesorito también se está acercando cada vez más a la conversación, ya que continúa expandiendo el menú de ruidos que puede hacer.
Hitos
- Reconoce a la gente familiar, incluso a distancia: ¡Vaya, cómo ha mejorado esa visión! Al principio, solo podía ver un brazo de longitud (su brazo) delante de él, pero ahora, tu bebé es incluso capaz de reconocer varias caras familiares en una misma habitación.
- Darse vuelta de adelante hacia atrás: Es fácil pasar por alto la importancia de un hito como este – después de todo, rodar como un barril no es un movimiento de baile muy común. Ya no, de todos modos. Sin embargo, el hecho de darse vuelta de adelante para atrás demuestra una gran cantidad de desarrollo físico, y lo pone más cerca de darse vuelta de atrás para delante. Por eso, es en ese punto donde ya no importa si tu bebé termina volteándose a su barriguita mientras duerme.
- Se empuja hacia arriba desde su estomago con los codos: ¡Baja y dame… una lagartija! Esta ‘lartija de bebé’ no es el comienzo de la movilidad, pero acerca a tu chiquitín al día cuando pueda poner una mano frente a la otra, y realmente llegar a alguna parte.
