La ropa equivocada puede arruinar todo el día, y nadie lo sabe mejor que un bebé: tú corres el riesgo de no notar una mancha que no salió del todo en la lavadora cuando sales corriendo por la puerta, pero tu bebé se arriesga a no poder decirte que su suéter es demasiado caliente para este día soleado.
Tu bebé depende de ti para asegurarse de que está vestido para el clima en estos primeros años de su vida. Si calculas mal cómo se siente con respecto a la temperatura, en el mejor de los casos vas a tener un bebé incómodo en tus manos hasta que te vayas a la casa y lo cambies, y en el peor de los casos, la exposición al calor o al frío extremo puede ser peligrosa para tu bebé. A medida que tu chiquito crece, su vida social y sus actividades crecen con él, lo que puede hacer que vestirlo de manera adecuada para el clima sea más difícil, ya que pasa cada vez más tiempo fuera de casa.
Ropa para combatir el calor
Una buena regla general para vestir a tu bebé de acuerdo al clima es que puedes vestirlo de la misma manera que te vistes a ti misma, en términos de temperatura. Cuando te vistes para el sol y el calor, hay una buena posibilidad de que, en lugar de cubrir cada centímetro de piel, te descubras un poco más para respirar, y confíes en el protector solar para protegerte. Sin embargo, recuerda que el calor suele venir acompañado de la luz del sol y que la piel de tu bebé no debe estar expuesta a la luz directa del sol todavía.
Como tu bebé no tiene la opción de exponerse al aire libre, un sombrero de algodón transpirable para el sol, preferiblemente con una adorable ala ancha y flexible, es ideal en estas situaciones. También es una gran excusa para una sesión de fotos. ¿A quién no le gustan las fotos de un pequeño bebé con un sombrero de sol gigante? Si tu bebé no es del tipo que usa sombrero, a veces una sombrilla en el cochecito o mochila, tal vez con una manta ligera en la parte delantera, también funciona. Esto significa que tu pequeño no tendrá la opción de salir del cochecito o de la mochila para explorar, aunque, si puedes convencerlo de que le dé una oportunidad al sombrero, probablemente sea el camino a seguir.
Trabajando de arriba hacia abajo, puedes seguir reglas similares – telas ligeras que cubran la mayor cantidad de piel posible, incluso en el calor. Dado que tu bebé usará tela, es especialmente importante que la tela sea ligera y transpirable y que no atraiga el calor. Colores claros, telas finas en lugar de tejidos de punto, y 100% algodón, son todas buenas elecciones para esas mangas largas, pantalones largos y calcetines para cubrir los pequeños dedos de los pies en un caluroso día de verano.
Ropa para protegerlo del frío
Vestir a tu bebé para el frío es difícil porque, si bien es cierto que no quieres que se enfríe, tampoco quieres compensar demasiado y hacerlo que se sobrecaliente. Las capas son una gran respuesta a este problema, pero tener capas que puedes quitar o añadir para mantener a tu pequeño a la temperatura perfecta sólo es una gran solución si prestas suficiente atención a las indicaciones que te dé para añadir o quitar capas cuando sea necesario. Por esta razón, y porque puede interferir con la seguridad del cinto de seguridad, es importante no abrochar una manta debajo de las correas de un asiento de coche, un portabebés o un cochecito. La manta puesta sobre las correas del asiento es una excelente forma de mantener caliente al bebé.
Una vez más, un sombrero es una pieza importante del equipo para una salida invernal, tanto porque el calor se escapa por la parte superior de la cabeza (y tu bebé no tiene pelo suficiente para mantener su cabeza caliente todavía) como porque incluso en clima frío, puede estar soleado, por lo que la cobertura es importante. Otros elementos clave para hacer frente a los elementos incluyen calcetines calientes – y tal vez zapatos, incluso si tu bebé no camina todavía – y algo para mantener sus manitas calientes. Los bebés son muy buenos quitándose los guantes, y a menudo no les gustan los guantes, pero hay algunas maneras de manejar esto. Por ejemplo, los guantes que se enganchan a las chaquetas son más difíciles de perder, y para los bebés que se niegan rotundamente a llevar las manos cubiertas, una chaqueta un poco grande, con mangas que se extienden sobre las manos del bebé, puede permitir que los deditos fríos se escondan. En caso de que haya una situación de emergencia, incluso un par de calcetines puede mantener las manos del bebé calientes.
Al final, la mejor manera de asegurarse de que tu bebé esté vestido para el clima es vestirlo de manera que te sientas cómoda – no necesariamente de la manera en que te vestirías, ya que los adultos a veces sacrifican la comodidad por el estilo, pero la manera en que te vestirías para estar calientita o fresca.
Fuentes
- «Caring for your newborn.» Sutter Health. Sutter Health, 2008. Web.
- «Dressing baby for bed.» Raising Children. Raising Children, Decenber 15 2014. Web.
