¿Cuál es la mejor solución para rebajar el vientre? Es más complicado de lo que piensas, y no puedes hacerlo rápidamente. He aquí cómo puedes alterar tu rutina de ejercicios y estilo de vida para tonificar y recortar tu sección media, y mantener tu cuerpo saludable.
Paso 1: entender la relación de tu cuerpo con la grasa
Diferentes tipos de grasa se almacenan en diferentes partes del cuerpo. La grasa visceral, localizada debajo de los músculos, amortigua los órganos internos. La grasa subcutánea está justo debajo de la piel y es lo que se puede pellizcar. Es más fácil de perder – pero también es menos riesgoso para la salud que el exceso de grasa visceral.
La gente almacena la grasa de manera diferente dependiendo de cosas como sus genes y hormonas, y como resultado, la mayoría de la gente nunca tendrá un abdomen completamente plano – ¡pero eso está bien! Si tu eres alguien que pone peso por encima de la cintura, tómate un momento para aceptar el hecho de que, debido a factores completamente fuera de tu control, puede ser más difícil dejar que se vea ese paquete de seis, pero eso no significa que no puedas tomar medidas para reducir tu grasa visceral y mejorar tu salud.
Paso 2: conocer la diferencia entre un núcleo fuerte y un abdomen marcado
Un abdomen marcado es la señal de un núcleo fuerte, seguro. Pero tener un núcleo fuerte no significa que necesariamente tendrás un abdomen visiblemente marcado. La grasa abdominal subcutánea cubre los músculos que muchos de nosotros deseamos desesperadamente que estén en exhibición, y tener una sección media definida requiere perder un cierto porcentaje de grasa corporal para que estos músculos sean visibles. En pocas palabras, se puede tener un núcleo fuerte sin tener un abdomen visiblemente marcado. La única manera de tener abdominales definidos es tener menos grasa en el estómago.
Paso 3: para obtener menos grasa visceral, combina el ejercicio con una dieta
Teniendo todo esto en cuenta, la mejor rutina abdominal es aquella que fortalece tu sección media y trabaja junto con un estilo de vida saludable. Esto significa que querrás hacer varios ejercicios abdominales para fortalecer tu núcleo, mientras comes saludablemente y haces la cantidad recomendada de ejercicio cada semana. Puedes perder grasa visceral al cambiar tu dieta y estilo de vida.
- Ejercicio: la mayoría de los expertos están de acuerdo en que los adultos deben hacer 150 minutos de ejercicio moderado a la semana, o 75 minutos de actividad intensa cada semana, así que asegúrate de que estés logrando esto – pero muestra a tu núcleo algo de amor, también. Por 3-5 días por semana, haz de 10 a 15 repeticiones de una variedad de ejercicios principales, como abdominales, postura de tabla regular o modificada y postura de tabla lateral. Tener una variedad en tu rutina de abdominales te permite trabajar más músculos centrales de lo que podrías hacer simplemente haciendo abdominales.
- Dieta: además de hacer ejercicio regularmente, los expertos sugieren que cambies tu dieta para obtener unos abdominales más sanos. La Facultad de Medicina de Harvard hace hincapié en reemplazar los carbohidratos refinados por carbohidratos complejos y obtener más grasas poliinsaturadas, en lugar de menos grasas saturadas y trans. Esto podría ayudar a reducir la cantidad de grasa visceral en tu cuerpo.