A lo mejor tenías mucho tiempo para ir a fiestas en tu juventud y hace mucho que no asistes a una fiesta de cumpleaños. La etapa de asistir a las fiestas de cumpleaños se acerca rápidamente en la vida de tu niño. Estos consejos sobre qué esperar de una fiesta de cumpleaños te ayudarán a estar preparada antes de recibir la primera invitación. ¡Con estos consejos, ambos serán los invitados perfectos!
Confirma tu asistencia
Imagínate planear tu propia fiesta y no saber quién va a asistir. ¡Y qué tal planear tu propia fiesta y no saber que 30 niños y sus padres van a asistir! Es importante hacerle saber a la anfitriona que el niño asistirá contigo, así que confirma tu asistencia lo antes posible.
El regalo de cumpleaños
Si te cuesta decidir qué comprar de regalo, es buena idea llamar a la anfitriona de la fiesta y preguntarle qué tipo de regalo le gustaría al cumpleañero. Te puede ofrecer algunas sugerencias o hacerte saber qué tipo de regalo ya tiene. Y si no te atreves a llamar por teléfono, puedes comprar una tarjeta de regalo.
La charla previa
Tu niño no tiene idea de qué esperar, por lo que es buena idea tener una pequeña charla antes de que llegue el día de la fiesta y una vez más antes de salir de casa para la fiesta. Déjale saber a dónde van, por qué van allí y cuáles son las reglas por seguir, por ejemplo, compartir, seguir instrucciones y esperar su turno. Obviamente el niño se olvidará de todo esto una vez que vea los globos y otros niños, pero aun así vale la pena prepararlo de antemano.
De ida
En unos pocos años, podrás dejar al niño solo en una fiesta de cumpleaños y pasarlo a buscar más tarde. Pero en este momento debes quedarte a su lado todo el tiempo en la fiesta. ¿No sería genial poder seguir esta regla en la adolescencia?
De vuelta
Puede que seas la última en irte de la fiesta o que tengas que irte temprano porque el niño no deja de jugar con los regalos del cumpleañero. Ambos casos son normales y, de todos modos, las fiestas a esta edad no deberían durar más de 2 horas. No sientas que tienes que quedarte hasta las velas no ardan.
De regreso a casa, toma nota de lo que te gustó sobre la fiesta. ¡Muy pronto estarás preparando la fiesta de cumpleaños de tu propio niño!
