La mayoría de las veces, la secreción vaginal es normal y saludable. Un cambio en el flujo vaginal es a menudo una de las primeras maneras de saber si hay una infección, irritación o desequilibrio en la vagina. Por supuesto, no hace falta que te esfuerces demasiado en vigilar tu flujo vaginal. Pero si le pones un poco de atención, podrás notar mejor si algo anda mal.
Mantener tu salud, por dentro y por fuera
Para ayudar a tu vagina a realizar sus múltiples funciones, hay algunas cosas que debes tener en cuenta con respecto a lo que pones en tu zona vaginal o cerca de ella.
- Evita los aerosoles de higiene femenina, el papel higiénico perfumado o de colores y las compresas o tampones con desodorante. Muchas mujeres son conscientes del olor natural de su vagina, pero las sustancias químicas de estos productos pueden matar las bacterias buenas y provocar infecciones (que, en efecto, huelen mal).
- Las duchas vaginales no son una buena idea. Estas duchas eliminan las bacterias sanas de la vagina, lo que aumenta el riesgo de infección, y alteran el equilibrio del pH del cuerpo, lo que a su vez provoca más olores desagradables.
- Si tomas baños de tina, no utilices jabones de burbujas perfumados porque pueden irritar la vagina.
- Procura comprar detergente para la ropa y suavizante sin perfume; de este modo, tu ropa no contendrá perfume que pueda irritar tu cuerpo.
Habla con tu proveedor si…
Con todos los diferentes tipos de flujo vaginal saludable, hay algunos signos y síntomas que justifican una llamada a tu médico. Si notas alguna de estas cosas, intenta no preocuparte. Llama a tu médico para concertar una cita y que te haga algunas pruebas. Si es necesario, tu médico puede ayudarte a recibir tratamiento para cualquier problema. Debes llamar a tu médico si notas alguna de las siguientes cosas:
- Si de repente tienes enrojecimiento, picazón o hinchazón en tu área vaginal
- Si notas llagas en o alrededor de tu área vaginal
- Si has estado sintiendo una sensación de ardor al orinar
- Si pudiste haber estado expuesta a una infección de transmisión sexual (ETS)
- Si has tenido síntomas durante más de una semana
- Si tienes fiebre y flujo anormal
- Si sientes dolor abdominal
Encontrar un proveedor en quien confiar
Es muy importante que sientas que puedes hablar con tu proveedor sobre cualquier pregunta que tengas, sin preocuparte por cómo reaccionarán. Sentir un poco de incomodidad o vergüenza es normal, pero sentir juicio o rechazo por parte de tu proveedor no está bien. Si este es siempre tu caso, no dudes en encontrar un nuevo proveedor con quien te sientas bien.
La mejor manera de mantenerte al día con tu salud vaginal es evitar productos irritantes, y estando pendiente sobre ciertos síntomas que indiquen que debes llamar a tu médico. La mayor parte del tiempo tu vagina no necesita perfumes o productos de limpieza adicionales; funciona mejor cuando se deja al natural.
Fuentes
- “What’s Vaginal Discharge?” KidsHealth. Nemours Foundation, Jan 2015. Web.
- “Vaginal Discharge Fact Sheet.” HHS.gov. U.S. Department of Health and Human Services, May 1 2004. Web.
- “Vaginal itching and discharge – adult and adolescent.” MedlinePlus. U.S. National Library of Medicine, Nov 5 2015. Web.
