La mastitis, una infección del tejido mamario, puede ocurrir en cualquier momento, incluso para las mujeres que nunca han estado embarazadas. Puede suceder en cualquier momento durante la lactancia materna, pero la mayoría de los casos ocurre durante los primeros dos meses.
¿Qué causa la mastitis?
La mayoría de los casos de mastitis son causados por una combinación de factores personales de la salud. Quizá has escuchado de microbioma [enlace en inglés], y es la razón por la cual unas personas son más propensas a la mastitis. La mayoría de los casos comienza como una inflamación en una parte del seno. Esas áreas de inflamación pueden desarrollarse en mastitis bacterial. El tratamiento temprano de la inflamación puede ayudar a reducir el riesgo de mastitis más grave que requiera antibióticos. Antes pensabamos que la mastitis casi siempre resultaba de la bacteria penetrando el seno por los pezones agrietados o de algún trauma. Ahora sabemos que es mucho más complejo, y que hay otros factores de riesgo importantes que vigilar. Sigue leyendo para conocer lo que ahora sabemos:
Factores de riesgo de mastitis:
- Casos previos de mastitis (durante esta fase del amamantamiento o con hijos anteriores).
- Ingurgitación ya sea por posponer o saltar el amamantamiento.
- Exceso de producción.
- Estrés.
- Anemia, que puede disminuir el sistema inmunológico y, por lo tanto, la resistencia a infecciones como la mastitis.
- Presión en los senos debido a un sostén muy apretado, cinturones de seguridad o cargar un bolso pesado.
- Enfermedad o infección en la madre o el bebé.
- Uso de cremas antifúngicos.
- Uso de antibióticos.
- Parto por cesárea.
¿Cómo es la mastitis?
La mastitis por lo usual solo afecta a un seno, el cual puede presentar cambios de color, hinchazón o dolor. La mastitis también se acompaña a menudo de fiebre, escalofríos y otros síntomas parecidos a la gripe, que pueden aparecer antes de que se presenten síntomas visibles como hinchazón o enrojecimiento. El dolor o una sensación de ardor durante la lactancia es también un síntoma de mastitis.
Las personas que sospenchan tener mastitis en ambos senos no deben esperar a contactar a su proveedor de atención médica o buscar cuidados de urgencia. Es raro tener mastitis en ambos senos y require pronta evaluación y tratamiento.
¿Cómo se trata la mastitis?
Cuando se detectan los síntomas de la mastitis, siempre es buena idea hacerlos revisar por un proveedor de atención médica. En mucho casos, la mastitis temprana se puede tratar con apoyo para tus síntomas y la inflamación. Llega un punto cuando los antibióticos pueden ayudar, y tu proveedor de atención médica puede ayudarte a decidir si son indicados. Si la mastitis progresa y no se trata, puede convertirse en absceso mamario, que a menudo requiere de tratamiento quirúrgico.
Si te han recetado antibióticos, estos deberían mejorar los síntomas (en particular los parecidos a la gripe) en los primeros 1-2 días. Si no sientes mejoramiento o te sientes peor, es importante dejarle saber a tu proveedor de atención médica. En este caso, te pueden pedir una muestra de tu leche materna para un análisis de laboratio y determinar si necesitas otro antibiótico. Mientras te recuperas de la mastitis, analgésicos y medicamentos para reducir la fiebre a base de acetaminofén (paracetamol) e ibuprofeno son seguros de usar durante la lactancia. El ibuprofeno es preferible ya que también puede ayudar a reducir la inflamación. Es muy importante tomar mucho líquido y descansar. La mastitis es una infección seria, y tu cuerpo necesita de más cuidado. El uso de compresas frías también pueden reducir el dolor y la inflamación en el seno inflamado. Puedes usar compresas frías por 5-10 minutos cada hora, o cuando más bien te haga.
¿Puedo amamantar teniendo mastitis?
La lactancia materna con mastitis es segura tanto para ti como para tu bebé, al igual que la mayoría de los antibióticos usados para el tratamiento. Muchas personas experimentan malestar estomacal del uso de antibióticos para la mastitis porque por lo usual se dan en dosis altas. Los probióticos pueden ayudar con el malestar estomacal, y pueden ayudar a reducir el riesgo de contraer mastitis de nuevo.
Amamantar o sacarse la leche con mastitis puede ser incómodo, y es importante no excederse. No tienes que sacar leche de más del lado con la infección, en más, esto puede empeorar las cosas. Escoje una posición o nivel de succión que te sea más cómodo, y trata de solo amamantar o sacarte la leche que tu bebé necesita ahora.
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Fuentes
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Mitchell KB et al. Academy of Breastfeeding Medicine Clinical Protocol #36: The Mastitis Spectrum, Revised 2022. Volume 17. «Mary Ann Liebert, Inc., Publishers». 2022. Print.
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Deng Y, Huang Y, Ning P, Ma SG, He PY, Wang Y. «Maternal Risk Factors for Lactation Mastitis: A Meta-analysis». West J Nurs Res. 43(7):698-708. Web. July 2021.