A veces, mantener ocupado al pequeño no es tan complicado como parece. Jugar con los objetos cotidianos del hogar no solo es fascinante para tu niño pequeño, sino que encontrar nuevos usos para los objetos antiguos fomenta el crecimiento de su imaginación y su capacidad de pensamiento creativo. ¡Deja un poco de tiempo frente a la pantalla y encuentra la diversión justo debajo de tus narices con estas sugerencias!
- Botellas de plástico: ¡Recicla las botellas de plástico en divertidas máquinas de hacer ruido! Enjuaga y seca una botella de agua o de soda plástica y retira la etiqueta. Llena la botella hasta la mitad con arroz seco, frijoles crudos o pasta. Si tienes cuentas de colores u otros juguetes pequeños (matatenas, canicas) en un cajón de basura, ¡no dudes en incluirlos también! Asegúrate de cerrar la botella y de asegurar la tapa con cinta eléctrica o cinta adhesiva para evitar que se suelte. Después de eso, ¡todo lo que queda por hacer es pasárselo a tu percusionista en ciernes para sacudirlo por toda la casa!
- Vieja tecnología: A los niños pequeños les encanta jugar con tus «juguetes», pero eso no significa que tengas que entregar tu iPhone a tu pequeño técnico cada vez que vaya por él. En su lugar, puedes usar teléfonos fijos viejos, controles fuera de uso, controles de videojuegos obsoletos o cualquier otra cosa con interruptores o botones para darle un poco de equipo adulto para su uso propio. Una vez que hayas quitado las baterías, los cables y cualquier pieza suelta que pudiera convertirse en un peligro de asfixia, a tu chiquitín le encantará apretar los botones y usar su imaginación con este tipo de juguetes, y consigues mantener el verdadero control remoto de la televisión fuera de su alcance.
- Rollos de toalla de papel, papel de envolver y papel higiénico vacíos: ¡Guarda tus rollos! Estos tubos de cartón puede que no te parezcan tan emocionantes, pero pueden ser transformados por la imaginación de un niño pequeño en horas de diversión. Una vez que hayas comenzado a guardarlos, puedes guardar una caja o contenedor de ellos y animar a apilarlos, construirlos y rodarlos. Tu pequeñín puede utilizarlos como instrumentos musicales, varitas o telescopios. Puede construir túneles para que los automóviles pequeños corran a través de ellos, o puedes pegar verticalmente un rollo largo o varios rollos pequeños a la pared, y enseñarle como meter bolas de algodón o pañuelos de papel en la abertura en la parte superior y ver como caen desde el fondo hasta el suelo. Diversión. Sin fin.
- Menaje de cocina: Los tazones de plástico y de madera pueden tener muchos usos divertidos además de sostener la comida. Pueden ser apilados, clasificados o incluso usados como sombreros. Combinados con cucharas, hacen unos tambores estupendos. Los niños pueden practicar «mover» objetos de diferentes tamaños en los tazones (cuentas, pasta cruda, o juguetes pequeños que funcionan muy bien para esto). Un colador y algunos limpiadores de tuberías ofrecen la oportunidad de practicar habilidades de motricidad fina y de crear algunas formas tridimensionales geniales. Consejo: evita usar ollas y sartenes para jugar. De esa manera no será confuso cuando estén en la parte superior de la estufa caliente y fuera de los límites de las manos pequeñas.
- Lavandería: Si. Incluso lavar la ropa es divertido… cuando no eres tú quien realmente la lava. ¡Una cesta de la ropa sucia vacía o llena proporciona una tonelada de entretenimiento gratuito! Llena una cesta de ropa poco profunda con ropa limpia o suavemente usada para excavar, enterrar y cavar. Tomen turnos para esconder un juguete en medio de una pila de ropa y encontrarlo. Tira los juguetes o los calcetines enrollados en la canasta desde el otro lado de la habitación. Practica los colores clasificando los calcetines u otros artículos dentro o fuera de la canasta, o deja que tu minimí te «ayude» con las tareas domésticas «doblando» toallas o fundas de almohada mientras haces otro trabajo.
