Usar el auto familiar como una manera de domar a un niño pequeño furioso o cansado es una estrategia tan común que es un estereotipo de los comercial de autos, pero hay unos cuantos niños pequeños aquí y allá que no parecen haber captado el mensaje. Si es menos probable que tu niño pequeño se quede dormido tranquilamente en el coche que ponerse a gritar hasta que se ponga azul, no estás solo.
No, no es un secreto, o una conspiración de niños pequeños. De hecho, hay una amplia gama de razones por las que los niños pequeños pueden querer hacer la guerra contra sus asientos de seguridad, incluso si no tenían problemas para viajar en el coche, o incluso lo disfrutaban. Sin embargo, hay algunas categorías comunes de las razones que podrían contribuir al odio por los viajes en automóvil.
¿Está cómodo?
Tu pequeño está creciendo rápidamente, y si las correas de su asiento del auto no se están expandiendo con él o ella, podría estar asociando el viajar en el auto con estar apretado. Si tu niño o niña está creciendo particularmente rápido, podría incluso haber pasado el límite de peso en que debe viajar en un asiento de seguridad orientado hacia atrás, y estar listo para dar la vuelta y mirar hacia adelante, por lo que vale la pena verificar su peso actual frente a los límites de peso para su asiento de coche. Más allá de eso, si el clima se ha vuelto cálido en tu parte del mundo, tu pequeño puede estar sobre calentándose (los asientos de seguridad para automóviles proporcionan mucho más insulación que los asientos para adultos, y los niños pequeños generalmente no tienen tanto control sobre las ventanas o el aire acondicionado.
¿Preferiría estar en movimiento?
Si tu niño pequeño prefiere correr, saltar o escalar, atarse a un asiento de seguridad puede sentirse como la peor parte de día. Adquirir el hábito de interrumpir los viajes largos con descansos regulares, de modo que tu peque puede salir y caminar puede ayudar a construir nuevas asociaciones con los paseos en coche. Y si tu eres un padre o madre que siente que un poco de soborno puede llegar muy lejos, puedes tratar de dejar que tu hijo escoja uno o dos juguetes para autos nuevos. Tu hijo escogerá algo divertido e interesante con lo que quiera jugar, y si quiere jugar con sus juguetes del coche, puede empezar a darse cuenta de que los viajes en auto no son tan malos.
¿Ha estado experimentando ansiedad por la separación?
Enojarse por estar amarrado en un asiento de seguridad no es una forma obvia de que la ansiedad por la separación se manifieste por sí sola, pero a pesar de que tú estás en el auto con él, tu pequeño está en un asiento orientado hacia atrás, y no hay garantía de que él siempre confíe en ese hecho. Cantar una canción juntos, o comenzar una conversación con él mientras abrochas sus cinturones del asiento, y luego sigues hablando con él o ella mientras conduces puede ayudarle a recordar que estás ahí mismo. También puedes considerar la posibilidad de configurar un espejo para que tu peque pueda verte desde el asiento trasero.
¿Conducir hace que se sienta fuera de control?
Muchas de las cosas que les suceden a los niños pequeños están fuera de su control, pero el hecho de que los pongan en el auto y los amarren en un asiento puede ser una de las más comunes que les quitan el control sobre sus cuerpos. Una manera de manejar esto depende de su aumento de las habilidades lingüísticas. Tu pequeño podría estar en la edad en la que con solo hablar de lo que está sucediendo y decirle por qué necesitas atarlo al asiento podría ser útil (aunque no te desanimes si esto no ayuda ya que tu hijo es todavía muy pequeño). Lo niños de la edad de tu pequeño a menudo tiene problemas con las transiciones, por lo que advertirle sobre lo que va a pasar (incluso si se siente más fácil posponer el contarle sobre tu viaje hasta el último segundo posible) y dejar que tenga la oportunidad de elegir qué juguetes llevar con él podría darle un sentido de control sobre el proceso.
Al final, sus protestas sobre el asiento de coche pueden o no ser sobre el asiento de coche. El asiento de coche puede ser el lugar que ha elegido para luchar por su independencia. Por otro lado, podría ser todo sobre el asiento del coche. Los asientos orientados hacia atrás son la forma más segura para que los niños viajen hasta que pasen el límite de peso de los asientos orientados hacia atrás, pero eso no hace que a los niños pequeños les gusten mucho. Si es el asiento mirando hacia atrás lo que molesta, hay una buena posibilidad de que se animará cuando sea el momento de girar el asiento convertible para que quede orientado hacia adelante. Esto no significa que el asiento deba ser girado antes de lo necesario, ya que sigue siendo la forma más segura de viajar para los niños pequeños, pero si este es el problema, el final está a la vista.