Lo más probable es que hayas visitado a un proveedor de atención médica, ya sea un ginecólogo/obstetra, una partera o un médico de familia, para recibir atención médica reproductiva de rutina y preventiva en algún momento. Se recomienda que las mujeres jóvenes visiten por primera vez para hablar de salud reproductiva cuando tengan entre 13 y 15 años de edad, o cuando se vuelvan sexualmente activas, lo que ocurra primero.
Pero incluso si tu has acudido antes, puede que haya sido hace un tiempo, o puede que nunca antes lo hayas visitado en un momento en el que estabas tratando de concebir. Así que, ¿qué puedes esperar una vez allí? Tu visita puede incluir:
Examen físico general
El examen físico general puede ser realizado por una enfermera que asiste a tu médico o por la partera. Esto generalmente consiste en una revisión de la estatura y el peso, así como en tomarte la presión arterial.
También pueden hacerte algunas preguntas básicas, como sí ha habido cambios importantes en tu salud desde la última visita, qué medicamentos o suplementos estás tomando actualmente, y si tienes alguna preocupación importante que te gustaría discutir durante la visita. También es probable que te pregunten las últimas fechas de tu período y sobre tu historial.
Discusión de la historia de salud, preocupaciones y preguntas
Este tipo de visita también dedica algún tiempo para hablar con tu proveedor de atención médica sobre sus antecedentes médicos personales y familiares. También puedes hablar sobre tu historial sexual, las opciones de anticoncepción, la fertilidad y los planes para la concepción.
Mientras discutes todo esto, tu proveedor probablemente te hará una serie de preguntas, y si tu eres honesta con tus respuestas, tu proveedor de atención médica será capaz de proporcionarte la mejor y más apropiada atención. Este es también el momento para que tu hagas cualquier pregunta que puedas tener – no importa cuán personal, e incluso si te sientes un poco avergonzada. Tu proveedor de atención médica está ahí para proporcionarte conocimientos médicos confiables, apoyo y para responder todas y cada una de tus preguntas.
Ya sea que tu estés tratando activamente de concebir o no, tu proveedor discutirá las opciones de salud reproductiva que funcionarán mejor para ti. Y si tu quieres tratar de concebir en un futuro cercano, este es el momento de decirle a tu proveedor acerca de estos planes para que ellos puedan compartir cómo puedes permanecer en buena salud mientras TTC.
Examen físico
Una enfermera acompañante puede o no permanecer en la habitación con tu proveedor de atención médica durante el examen físico. Durante este examen, es probable que te desvistas y que lleves puesta una bata médica que se abre en el frente y una hoja de papel para cubrir tu regazo, y el examen podría incluir un examen pélvico, un examen bimanual, un examen de los senos y un examen rectovaginal.
Durante el examen pélvico El médico puede examinar la parte externa de la vagina, incluyendo la vulva y la abertura vaginal. El médico también puede examinar el interior de la vagina y el cuello uterino con la ayuda de un dispositivo llamado espéculo, el cual mantendrá abierta la vagina. También pueden hacer un examen bimanual interno colocando dedos enguantados dentro de la vagina mientras coloca su otra mano en la parte inferior del abdomen, donde se encuentran los órganos reproductivos para sentirlos.
El proveedor también puede realizar un examen rectovaginal según sea necesario, lo que implica que coloque un dedo enguantado en la vagina y otro en el recto.
El examen de mama puede implicar que tu proveedor te examine y palpe tus senos en busca de bultos u otras anormalidades. También pueden sentir el cuello y la garganta. Al hacer todo esto, su objetivo es ver y sentir que está sana, y que no observan ninguna anormalidad.
Durante el examen físico puedes sentir algo de presión o una ligera molestia, pero nada de esto debe ser doloroso. Si sientes molestias o dolor, asegúrate de decírselo a tu proveedor.
Exámenes de laboratorio o de detección
Según tu historial médico y las conversaciones con tu proveedor, existe la posibilidad de que te recomienden pruebas de laboratorio o pruebas de detección, ya sean de rutina o especializadas, en función de tus necesidades de atención médica. Éstos podrían incluir una muestra de sangre, una prueba de orina, pruebas de ETS o una prueba de Papanicolaou. Estas pruebas pueden realizarse antes o después de que tu te reúna con el proveedor.
Las citologías vaginales se realizan durante el examen pélvico y consisten en que el médico desliza un cepillo pequeño por el cuello uterino. (Las células tomadas de la muestra se analizan en un laboratorio para detectar cáncer de cuello uterino y otras anomalías).
Independientemente del tipo de proveedor que consultes, tu proveedor de atención médica está destinado a ser un aliado en tu atención, ayudándote a mantener una buena salud reproductiva en todas las etapas de tu vida.