Pastel y helado. Helado y pastel.
Es fácil pensar que los alimentos de cumpleaños -especialmente los alimentos de cumpleaños para niños pequeños- se reducen a estos dos alimentos básicos, pero no siempre es así. Hay algunas razones por las que una fiesta de cumpleaños podría incluir algo más que estos alimentos básicos. Muchos niños pequeños tienen alergias alimentarias graves o intolerancias alimentarias, lo que hace que la comida típica de la fiesta sea un reto. Las familias de diferentes culturas pueden tener diferentes tradiciones que traer a la mesa. Y algunos padres pueden hacer que sea una prioridad comer alimentos saludables en su vida diaria, y puede que no quieran abandonarlo todo por una tarde de golosinas azucaradas.
Traza tu propio curso
Una vez que tu chiquitín entra al circuito de fiestas de cumpleaños de niños pequeños, es posible que se sienta presionado a seguir la plantilla establecida por otras familias. Sin embargo, tú eres, en última instancia, la persona que decide cómo celebra tu familia. Tal vez hayas recreado el regalo tradicional de celebración de tu familia en lugar de un pastel de cumpleaños. O tal vez tu pollito tenía sus ojos puestos en tener su cumpleaños en el zoolóico interactivo, por lo que decidiste incluir panecillos de cumpleaños saludables en la bolsa de regalos para llevar a casa en lugar de tener que ocuparse de la logística de servirlos en el lugar.
Independientemente de la dirección que decidas tomar para la próxima fiesta de cumpleaños número tres, hay algunas maneras en las que puedes trabajar para eludir algunos de los desafíos que podrían surgir.
- Haz una encuesta rápida: Debido a la prevalencia de alergias e intolerancias alimentarias, es útil saber de antemano quién no puede comer qué en la fiesta. Después de enviar las invitaciones, es una buena idea enviar un breve correo electrónico a los padres pidiéndoles que te informen en privado y de antemano si hay algún problema relacionado con las alergias que debes tener en cuenta cuando planifiques el menú. De esta manera puedes asegurarte de tener alternativas a mano.
- Saber cuándo marcar el límite: En tu correo electrónico a los padres, pide específicamente información sobre alergias e intolerancias alimentarias. La planificación de la fiesta cogerá vida propia si los padres piensan que quieres saber acerca de las preferencias o están buscando sugerencias – «Madison odia el glaseado de crema de mantequilla» y «Jonathan solo beberá una cierta marca de jugo», pronto pueden empezar a tomar vida propia.
- Busca el equilibrio: Los padres tienen diferentes ideas sobre lo que constituye «saludable» cuando se trata de la comida de los niños pequeños. Si bien es posible que no desees enviar a tus invitados a casa en una gran subida de azúcar, también es posible que no desees eliminar todos los dulces – y puedes aliviar un poco la presión de ti misma recordando que no podrás complacer a todo el mundo. Sin embargo, a menudo se puede llegar a un término medio feliz tratando de lograr el equilibrio. Si estás sirviendo el clásico dúo de pastel y helado, por ejemplo, trata de no servir jugo y escoge agua, o agrega una bandeja de coloridas fresas cortadas y pequeñas rebanadas de melón a la mesa y coloca unos pocos trozos en cada plato junto al pastel.
- Sirve algunas opciones: Aunque hayas trabajado duro para no parecerte a un cocinero de comida rápida en la fiesta, a la mayoría de los niños pequeños les va un poco mejor en situaciones en las que tienen una medida de control. Para evitar la crisis de un «Odio pastel de vainilla», puedes hablar con un panadero local sobre un pastel dividido -mitad chocolate, mitad vainilla- para que puedas ofrecer opciones limitadas a los invitados.
Con un poco de planificación previa, puedes crear una fiesta divertida y memorable que celebre el tercer cumpleaños de tu tesorito de una manera que se sienta bien para tu familia.