Algunos pequeños dan a conocer sus intereses alto y claro, insistiendo en usar cierta ropa, y en llevar ese juguete especial a cada simple mandado.
Para otros niños, determinar dónde están sus intereses puede tomar un poco más de esfuerzo. Si no estás segura de a qué actividades inscribir a tu bebé, por ejemplo, hay algunas cosas que puedes hacer para tratar de averiguar qué es lo que disfrutará. Puedes:
- Exponerlo a diferentes actividades: La mejor manera de aprender sobre lo que más le gusta a tu bebé es dándole muchas oportunidades de probar cosas nuevas. Un viaje al zoológico puede despertar esa pasión por los animales que antes no se veía, mientras que una visita a un juego o partido puede despertar el interés por los deportes.
- Seguir su iniciativa: Si observas atentamente, puedes darte cuenta de que tu bebé tiene un gran talento en un área determinada. Puede que sea capaz de moverse al ritmo de la radio con gran ritmo o hacer arte que exceda las expectativas apropiadas para su edad. Si esto es cierto, y parece que le gusta la actividad, puedes considerar inscribirlo en clases.
- Considerar su personalidad: La personalidad de un niño puede ayudar a guiar a los padres hacia intereses que encajan bien. Los pequeños con mucha energía, por ejemplo, pueden disfrutar participando en un deporte o en una clase de volteretas que ofrece la oportunidad de quemar toda esa energía.
- Dejar que los intereses se desarrollen orgánicamente: Un padre que está perplejo sobre lo que su hijo podría disfrutar puede sentirse inspirado y empujarlo a participar en sus propios intereses o en los de un hermano. Aunque es un instinto natural, al final, todos serán más felices si dejan que el bebé decida lo que le gusta, incluso si le toma un poco más de tiempo. Les hará saber una vez que encuentre algo que le guste.
- Minimizar la inversión: Los niños pequeños pasan por intereses más rápido que por la ropa, así que ten eso en cuenta antes de que compres accesorios caros, o inscribas a tu bebé en una actividad que requiera un compromiso a largo plazo.
Los niños de tres años están empezando a desarrollar un sentido más fuerte de sí mismos. Sigue alentando las pasiones de tu bebé mientras mantienes tus expectativas realistas, y no te preocupes si le toma un poco más de tiempo decidir qué es lo que le intriga – antes de que pase demasiado tiempo, verás cómo sus intereses evolucionan ante tus ojos. Una vez que descubra su pasión, se asegurará de que la conozcas.