Estaba en una fiesta infantil cuando me di cuenta, horrorizada, de una niña llorando en el suelo. Me sentí muy mal por la niñita, pero también sentí vergüenza porque yo era la madre del niño que la golpeó. No entendí de dónde había sacado eso mi hijo. Nunca se mete en problemas en casa y, de acuerdo con su proveedor de cuidado infantil, nunca había demostrado este comportamiento antes. Estaba desconcertada, pero sobre todo, estaba avergonzada. Es difícil cuando tu hijo ataca con golpes.
Según un conocido pediatra y especialista en desarrollo infantil, el Dr. William Sears, golpear es una etapa normal del desarrollo de los niños pequeños. Él enfatiza la importancia de no tomarlo como algo personal o creer que ese comportamiento refleja lo que estás haciendo como madre. Sears dice: «Las manos son herramientas de comunicación, especialmente para los niños pre-verbales». Por supuesto, eso no hace menos frustrante el hecho de que tu pequeño golpea a la gente.
He aquí tres cursos de acción para cuando tu bebé golpea.
Busca las causas
«¿Por qué?» es una de las preguntas más comunes que te haces en esta situación. Naturalmente, si nuestros hijos están pegando, nos vamos a preguntar cuál es la causa. ¿Están copiando comportamiento que han visto? ¿Se están expresando físicamente porque no tienen las habilidades verbales para hacerlo? Hay un montón de razones por las que un niño puede estar pegando.
Lamentablemente, a veces estas razones no se pueden medir. Haz todo lo posible para prestar atención al ambiente en el que se encuentra tu hijo y ve de qué manera ha estado expuesto a este comportamiento, aunque es posible que nunca descubras qué es lo que inspira la acción.
Desanímalo consistente y gentilmente
Cualquiera que sea el curso de acción que quieras tomar para que tu hijo no pegue, sé consistente. Por ejemplo, yo trato de tomar las manos de mi hijo y le digo: «No, nosotros no pegamos», cada vez que lo hace. Aunque nuestros hijos son pequeños, su comprensión es a menudo mejor de lo que pensamos. Responder consistentemente y dejar claro que golpear no es una opción es una de las mejores maneras de evitar exacerbar el problema.
Entiende que puede ser una fase
Como el Dr. Sears mencionó anteriormente, golpear es algo por lo que la mayoría de los niños pasan, y esta podría ser otra oportunidad para ejercitar tu paciencia.
Desafortunadamente, hay algunas cosas que debemos permitir que sigan su curso. A partir de conversaciones que he tenido con otras mamás que han estado allí y sobrevivido, golpear podría ser una de esas etapas.
Mientras esperamos completar esta etapa de prueba, es esencial que seamos conscientes de todo lo que hacemos y decimos. No quieres reforzar el comportamiento negativo. Si las cosas se ponen difíciles, considera hablar con un especialista en desarrollo infantil para ver si tiene alguna recomendación sobre cómo hacer que esta etapa sea más manejable.
Sobre la autora:
Rochaun Meadows-Fernandez es una escritora que se especializa en sociología, salud y paternidad. Su trabajo ha aparecido en Healthline, Yes! Magazine, HuffPost, Allure y muchas otras publicaciones. Síguela en Facebook, Twitter, o visita su sitio.
Fuentes
- William Sears. “Ask Dr. Sears: Toddler hitting.” Parenting. Meredith women’s network. Retrieved December 11 2017. http://www.parenting.com/article/ask-dr-sears-toddler-hitting.