Por supuesto que lo has oído antes: ¡los niños son caros! Incluso si mantienes las cosas simples, hay algunos gastos nuevos que serán parte de tu vida una vez que te conviertas en madre. Más allá de esas adorables camisitas y ese equipo para bebés recién nacidos que te dieron en tu baby shower, hay algunos gastos que pueden ser menos esperados y sorprendentes. Pero, la buena noticia es que ¡puedes empezar a planear para estos gastos adicionales ahora! Algunos de estos gastos pueden incluir:
- Pañales y fórmula:Estos son artículos que tu bebé no siempre necesitará, pero si uno o ambos de estos artículos están regularmente en tu lista de compras, los costos se acumulan. Asegúrate de añadir cualquier gasto regular como éste a tu presupuesto, al menos hasta que tu pequeño sólo esté comiendo sólidos (pronto) y haya aprendido a usar el baño (no lo suficientemente pronto).
- Comida:A medida que tu pequeño crezca, también lo hará su apetito, y si no te das cuenta antes, definitivamente notarás un cambio en tus gastos en el supermercado para cuando llegue a los dos años.
- Cuidado de niños: Si aún no has pensado en esto, deberías hacerlo ahora. Para muchas familias, el cuidado de los niños es un gasto muy grande y ésta es una de las maneras más importantes en que tus patrones de gasto cambiarán. Aquí está un desglose de los costos promedio del cuidado de los niños por Estado del Instituto de Política Económica para tener una mejor idea de lo que debes planear en tu presupuesto.
- Artículos de conveniencia:Comida para llevar cuando estás demasiada cansada para cocinar, comestibles entregados a la casa cuando tu pequeño tiene un virus estomacal y la nevera está vacía, un limpiador una vez al mes si ya no puedes hacer las tareas domésticas como solías hacer. Este tipo de cosas pueden hacer una gran diferencia si estás en apuros, pero se acumulan.
- Necesidades a medida que el bebé crece:A medida que tu pequeño crezca, necesitará ropa nueva, zapatos, ropa exterior y cosas por el estilo. Probablemente también querrás comprar ocasionalmente artículos para bebés como libros y juguetes. Ya sabes que todas estas cosas cuestan dinero, pero es posible que aún no hayas tenido en cuenta este gasto que pronto será regular en tu presupuesto.
- Artículos para el hogar: Antes de que te dés cuenta, es posible que tengas que comprar artículos para tu casa como puertas para proteger al bebé o una cama para niños grandes cuando tu pequeño ya no quepa en su cuna.
- Equipo a medida que el bebé crece: Esto puede incluir artículos como un asiento de seguridad más grande o un asiento elevador para la mesa del comedor.
- Clases, lecciones y equipo extracurricular: No olvides incluir los costos de las lecciones de guitarra, fútbol y ballet, pero también el equipo de guitarra, las espinilleras para el fútbol y los leotardos para el baile.
- Facturas de servicios públicos:Esto puede ser una sorpresa, pero las cuentas de agua, calefacción y electricidad podrían aumentar un poco una vez que nazca tu bebé. Más lavandería, dejar el calor o el aire acondicionado con más frecuencia, más tiempo en casa – todo se acumula.
- Tiempo libre del trabajo:La situación laboral de cada uno de los padres es diferente, y para muchas personas tomar tiempo libre del trabajo significa menos ingresos. Más allá de cualquier permiso parental que puedas tomar después de que nazca tu bebé, es posible que necesites y desees tomarte un tiempo libre para pasar con tu pequeño mientras crece, por razones divertidas (¡vacaciones!), algo divertidas (vacaciones escolares), y no tan divertidas (cuando tu pequeño se enferma).
- Atención médica:Para muchas personas, agregar un nuevo dependiente a su seguro de salud significa un aumento en su prima mensual, y probablemente también significa un aumento en el deducible. Averigua los detalles específicos de tu plan de salud para estar segura. Y tener a una persona más en la familia significa, por supuesto, costos adicionales por citas con el proveedor o visitas a la sala de emergencias, recetas o medicamentos de venta libre, suministros médicos y similares.
- Seguro de vida:Esto es un gasto que muchos padres consideran que vale la pena para agregar una sensación adicional de seguridad sobre el futuro de tu familia.
- Vivienda:Esperemos que estés lo suficientemente cómoda donde estás ahora mismo. Pero no es raro que los nuevos padres decidan que necesitan un poco más de espacio a medida que su familia crece.
- Otros cambios en el estilo de vida:Es difícil saber lo que nos depara el futuro, pero ¿querrás llevar a tu pequeño a los conciertos? ¿Decidiste comenzar a pescar en familia? ¿Ir al parque de diversiones local en verano? ¿Tomar unas vacaciones diferentes? Estos cambios también podrían afectar tus gastos.
- Universidad o escuela técnica:Para los padres que tienen su propia deuda estudiantil, puede ser descabellado empezar a pensar en la educación de tu propio hijo tan pronto, pero es algo que puedes empezar a planear si tienes los medios.
Algunos de los elementos de esta lista son cosas que podrías querer comenzar a presupuestar por ahora, y otros son elementos que podrías querer conocer como un gasto que podría venir en el futuro. Considera también que las necesidades de tu familia cambiarán con el tiempo; algunos costos no durarán para siempre (como los pañales, gracias a Dios) y surgirán nuevos costos (como lecciones de piano o un vestido de graduación). Es muy fácil que el dinero sea una fuente de estrés, así que si leer una lista como esta parece poco divertido, entendemos cómo te sientes, pero el conocimiento es poder, y ser consciente de las formas en que tus gastos podrían cambiar debe ser, en última instancia, empoderante para que puedas tomar las medidas que necesitas para sentirte segura de cómo estás gastando tu dinero.