Todos queremos ofrecer refrigerios caseros y saludables para nuestros hijos, pero afrontémoslo, a veces sólo queremos echar algo rápido en la pañalera y salir de la casa corriendo. En un esfuerzo por ahorrarte tiempo en el supermercado, he reunido algunos consejos para ayudarte a clasificar la asombrosa variedad de bocadillos que están en el mercado y se comercializan para los bebés.
Pouches
Portátiles y disponibles en todas partes, los «pouches» son bolsitas con purés de frutas y verduras que los niños adoran. Son una versión más ligera y conveniente de los alimentos para bebés en tarro de vidrio, e incluyen una boquilla de la que los niños pueden succionar el puré de forma independiente.
Muchas bolsas son dulces y están hechas con frutas como ingrediente principal. Para obtener más porciones de vegetales de las bolsas, lea la lista de ingredientes para ver qué hay dentro y elige uno en el que las verduras sean el primer ingrediente.
Evita confiar en las bolsas como una forma primaria de nutrición, ya que limitan la exposición a una variedad de texturas y colores de alimentos. Esto puede dificultar la introducción de alimentos sólidos a medida que los bebés crecen. En lugar de eso, guárdalos para meriendas ocasionales o para emergencias cuando tu hijo tenga hambre mientras están fuera de casa.
Puffs
Estas pequeñas bolitas se derriten fácilmente en la boca, lo que las hace fáciles para los bebés que están usando su «agarre de pinza», y que ya se sientan solitos (generalmente alrededor de 9 meses) para comer. Sin embargo, la mayoría de este tipo de bocadillos son altamente procesados, hechos principalmente de harina de arroz, carentes de fibra y nutrientes, y endulzados con azúcar.
Al igual que con los ¨Pouches¨, los ¨Puffs¨ son mejores como algo ocasional. Los ¨Cheerios¨ de la vieja escuela, hechos con granos enteros y fortificados con hierro, son una mejor opción y tan fáciles de llevar como los «Puffs».
Barras
Mientras que algunas barras pueden ser saludables, la mayoría son barras de caramelo disfrazadas. Todas las barras para niños que he revisado están hechas con azúcar añadida, y la mayoría son bajas en fibra y proteína. La American Heart Association recomienda que los niños no consuman más de 25 gramos (o 6 cucharaditas) de azúcar al día y que eviten los azúcares añadidos menores de 2 años.
Debido a que tu hijo puede estar obteniendo azúcar de otras fuentes a lo largo del día, elije una barra que tenga menos de 10 gramos de azúcar para mantenerte dentro de las recomendaciones. También busca productos que tengan granos enteros como primer ingrediente en una lista corta de ingredientes.
Bocadillos de frutas
Las tiritas y las bolitas de frutas han sido populares desde que era un niña y no pasarán de moda pronto. El único cambio parece ser la abundancia de bocadillos de frutas que dicen ser saludables. Mira más allá de la etiqueta de «orgánico» y ve estos bocadillos por lo que realmente son – ¡dulces!
Si deseas encontrar un bocadillo de fruta saludable para tu pequeño comelón, prueba con trozos de fruta congelados-secos que están cada vez más disponibles en las tiendas. Comúnmente considerados como «alimentos espaciales», son más fáciles y seguros de masticar para los niños pequeños que las frutas secas, y son alimentos naturales e integrales que todavía tienen todo su valor nutritivo.
Frutas enteras y verduras cortadas
Por supuesto, si deseas seleccionar la opción más saludable, mantén una reserva de verduras y frutas listas para comer al alcance de la mano. Una banana madura, rebanadas de manzana o cabezas de brócoli son fáciles de guardar en la casa y llevar contigo en el camino. Vigila a tus hijos mientras comen cualquier alimento y elige alimentos de tamaño y textura adecuados para minimizar el riesgo de asfixia.
Sobre el autor:Jennifer es una dietista apasionada por conectar la buena nutrición con la comida sabrosa. Dirige un consultorio privado, Nutrir para la vidadonde trabaja con madres primerizas y padres de niños pequeños para ayudarles a comer bien y tener una relación saludable con los alimentos. Ella es madre de un pequeño humano y dos mascotas peludas, y le encanta crear nuevas y deliciosas recetas en su tiempo libre.
Fuentes
- Vos MB, et al. «Added Sugars and Cardiovascular Disease Risk in Children, A Scientific Statement From the American Heart Association.» Circulación. 9 de mayo de 2017;135(19):e1017-e1034. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/27550974.