Aunque tengas una buena relación con el otro progenitor de tu hijo o hija, la coparentalidad puede ser difícil de manejar: dos horarios y dos hogares, además de todos los retos emocionales asociados (para los adultos y los pequeños).
Cuando uno se compromete a criar a sus hijos de forma compartida, hay formas de hacer que funcione. Lo más importante es establecer un horario con expectativas y normas coherentes. Cuando los hijos tienen una idea clara de cómo va a ser su semana y saben que las expectativas de sus padres están alineadas, les resulta más fácil adaptarse.
Cuanto más fácil lo pongas, mejor será para todos.
La coparentalidad efectiva
Hablemos de la comunicación
Encontrar la mejor manera de comunicarse entre ambos padres es algo que quizá evolucionará con el tiempo, pero tanto si hablan a diario como una vez por semana, tener una comunicación clara y abierta es clave.
Lo primero es lo primero: establece un horario para planificar tu agenda. Debe ser un momento en el que ambos estén tranquilos (por ejemplo, el primer lunes de mes, cuando tu pequeño está en una actividad extraescolar habitual). Si hay tensión entre ustedes, puede ser útil comunicarse por correo electrónico o mensaje de texto. Así no tendrás que hablarle de manera directa y tendrás un récord de lo acordado.
Segundo, planifica cómo atender los casos de emergencia, cómo vas a interactuar cuando le lleven o le recojan y cómo vas a manejar las ocasiones especiales. Pueden surgir situaciones que no habías previsto, pero haz todo lo posible por planificar de forma proactiva los momentos que puedan ser tensos (por ejemplo, con quién pasará determinadas vacaciones o el cumpleaños).
Si las cosas empiezan a calentarse, acuerda comunicarte solo sobre tu hijo o hija y hacerlo de manera profesional. Esta práctica te ayudará a mantener las emociones al margen. Al fin y al cabo, comparten un objetivo común: ambos quieren lo mejor para los hijos. Esto será más fácil con el tiempo.
Planifica los horarios
La coparentalidad implica muchas piezas en movimiento. No solo tienes que tener en cuenta tus horarios, sino también los de tu hijo o hija. Trabajen en estrecha colaboración para ayudar a que las cosas funcionen sin problemas. Asegúrate de cumplir los acuerdos de custodia que se hayan establecido e intenta abordar los conflictos de horarios con paciencia y compasión.
Una forma estupenda de mantener la misma sintonía es compartir un calendario o utilizar una aplicación de calendario. De este modo, ambos podrán ver lo que la otra persona ha planeado y podrán organizarse juntos. Puedes añadir al calendario el horario habitual, las ocasiones especiales y las actividades de tus hijos.
La coherencia es la clave
Mantener la coherencia semana a semana y fijar expectativas claras contribuirá al éxito de la coparentalidad.
Por supuesto, ambos pueden tener estilos de crianza diferentes, pero haz lo posible por alinearlos. Por ejemplo, si en una casa hay que guardar la tecnología a las 5 de la tarde, es importante que en la otra se aplique la misma norma. A los niños les gusta la coherencia, y al tuyo le irá mejor cuando sepa qué esperar (aunque se oponga a algunas de tus normas en el momento).
Dar prioridad a los hijos
Si la logística hace posible que tu hijo o hija vea a ambos progenitores con regularidad, suele ser lo mejor y le da espacio para desarrollar un vínculo fuerte con cada uno. Sin embargo, si no es posible por razones logísticas o de seguridad, su bienestar es la prioridad.
No hay dos familias exactamente iguales, ni dos situaciones de coparentalidad iguales. El hecho de que el mismo tiempo con ambos padres funcione para algunas familias puede no ser lo mejor para tu hijo o hija. Tú sabes lo que es mejor para tu familia.
Háblale sobre cómo le está afectando esta situación y anímale a hablar si tiene alguna duda. Su vida se verá muy afectada por esto, así que si algo no está funcionando, puede que tengan que trabajar juntos para encontrar una solución. Si no te habla de cómo se siente, puede ser útil hablar con su maestra, que podría aclarar sobre su bienestar emocional fuera de casa.
Si te cuesta superar una situación difícil de coparentalidad, habla con tu proveedor de atención médica o con un terapeuta familiar para que te ayuden. Para la mayoría de las familias, la coparentalidad es lo más difícil al principio, pero con el tiempo se va agarrando el ritmo.
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Cómo decirles que se están mudando
Fuentes
Donovan, Sherri. “Co-Parenting Boundaries: List of Rules.» Parents Inc. Parents Inc. https://parentsinc.org/co-parenting-boundaries-list-of-rules/
Pedrick Law Group. «Why Does Consistency Matter in Co-Parenting?» Pedrick Law Group. Pedrick Law Group. July 18, 2021. https://www.pedricklaw.com/ways-to-maintain-consistency-with-co-parenting-the-importance-of-working-together/