A nadie le gusta sentir tristeza, enojo o frustración. Sin embargo, cuando eres padre o madre, ver a tu hijo o hija luchar contra estas emociones puede ser incluso más duro que si tú las experimentaras. Aunque no hay manera de proteger nuestros hijos de sentimientos negativos, podemos ayudarles a aprender a manejar y expresarlos, algo que les beneficiará de inmediato y a largo plazo. Aquí cómo puedes ayudar a tu adolescente a identificar maneras productivas para expresar frustración y otros sentimientos grandes.
Da el buen ejemplo
«Como padres y cuidadores, nuestra capacidad para expresar, identificar y manejar nuestras emociones fuertes es una manera importante de que niños y adolescentes aprendan. La buena noticia es que es normal e importante demonstrar que eres humano y experimentas todo tipo de emociones. No pasa nada ser auténtica en tu hogar.
Pero hay una gran diferencia para niños, por ejemplo, cuando sus padres expresan enojo cerrándose, gritando o alejarse en vez de hablar. «He tenido un día difícil mientras estabas en la escuela. Una situación en el trabajó me enojó, y no es tu culpa para nada. Tengo sentimientos muy grandes con que lidiar hoy». Tu hijo o hija no tiene que ser tu confidente o comprender tus problemas grandes, pero pueden ver que está bien sentir emociones y que los difíciles no duran para siempre», dice Lilly Schott, Coach de salud de Ovia.
Dedica un poco de tiempo a reflexionar sobre cómo manejas tus emociones y considera si estás dando un ejemplo que quieres que tus hijos sigan. Si crees que esto te es difícil, hay muchas vías para trabajar en el cambio. Muchos coaches y expertos disponen de recursos, mientras que acudir a terapia también puede ayudarte a desarrollar las habilidades para enfrentar problemas que esperas transmitir a tus propios hijos.
Comparte ideas concretas
Es fácil decirles a nuestros adolescentes que se calmen. Decirle a alguien que se calme sin enseñarle cómo hacerlo no es muy eficaz, y a menudo tiene el efecto contrario en el momento. Cuando hables con tus hijos sobre el manejo de las emociones fuertes, ofréceles algunas opciones concretas que puedan probar. Cosas como respirar profundo, escuchar música que les guste, alejarse, golpear una almohada, escribir un diario o mover el cuerpo pueden ser muy útiles para manejar las emociones.
Háblale cuando esté de buen humor
Aunque puede ser tentador intentar ayudarle a «calmarse» cuando siente enojo o frustración, es en realidad difícil que los cerebros activados aprendan nuevas habilidades. En lugar de intentar enseñarle una herramienta para manejar la ira o la frustración cuando ya siente el enojo, introdúcela cuando esté tranquilo y contento. Practíquenlo juntos antes de pedirle que lo intente cuando sienta mucho enojo.
Señala cuando esté haciendo un buen trabajo
Cuando tu adolescente está experimentando una emoción difícil y la está afrontando bien, puede ser poderoso señalarle lo bien que lo está haciendo. Puedes decir algo como: «Sé que te disgustó mucho enterarte de que tu amiga corrió un rumor sobre ti. Sé que estás muy enojada y me enorgullece que hayas decidido hablarlo conmigo y salir a correr antes de llamar o mandar un mensaje a tu amiga».
Sé la roca
Cuando nuestros hijos están enojados o se enfrentan a una situación complicada, a menudo queremos saltar y «arreglarlo». Muchas veces, nuestro trabajo no consiste en arreglar nada, ni siquiera en ofrecer una solución. Es poderoso sentarse juntos, escucharle de manera profunda y reconocer que sus emociones son reales y válidas. Una simple frase como «te creo» puede llegar muy lejos. Permitir que niños mayores y adolescentes resuelvan sus problemas es crucial para su independencia, aunque tú quieras intervenir con un millón de formas de hacerlo mejor.
Aunque todos sabemos que es importante que niños aprendan a manejar las emociones difíciles, ver a nuestros hijos experimentar frustración, tristeza y enojo puede ser en verdad duro. La próxima vez que veas o tengas la sensación de que está experimentando algo difícil, respira profundo y recuerda que la forma en que le ayudes a procesar sus emociones ahora tiene el poder (enlace en inglés) de proporcionarle la inteligencia emocional que le beneficiará durante toda su vida.
Revisado por el equipo clínico de Ovia Health
