La Dra. Leslie Saltzman es la directora médica de Ovia Health, además de ejercer como médico colegiado especializada en medicina interna. Hoy se ha sentado con nosotros para hablarnos un poco de su experiencia con la menopausia, tanto desde una perspectiva personal como de proveedora de atención médica. La Dr. Saltzman es miembro de la Sociedad Norteamericana de Menopausia (North American Menopause Society). Vive en Nueva York con su esposo y sus hijas y atiende a pacientes en su ciudad natal, Filadelfia.
¿Puedes hablarme un poco de tu experiencia con la menopausia?
Experimenté la menopausia como resultado de una histerectomía con salpingooforectomía bilateral, o extirpación del útero, las trompas y los ovarios. Solo tenía 36 años cuando tuve la cirugía.
Pasar por la menopausia tan temprano fue muy duro para mí. En cierto modo, tuve que lamentar que mi vida no saliera como yo pensaba. Había una parte de mí que quería tener más hijos, y me entristecía mucho que ese capítulo de mi vida llegara a su fin. Sentía que la decisión de tener o no más hijos la habían tomado por mí.
También creo que había interiorizado algunos de los mensajes de que las mujeres posmenopáusicas tienen menos valor en nuestra sociedad. Me preocupaba sentirme mucho mayor de repente y no ser la misma. También estaba amamantando y me preocupaba que pudiera afectar a mi producción de leche.
Ahora, mirando hacia atrás, me siento muy cómoda con mi decisión, pero es importante reconocer que puede haber un profundo sentimiento de pérdida asociado a la menopausia.
¿Crees que el hecho de tener la menopausia a una edad más temprana que la mayoría de las personas influyó en las conversaciones que has podido mantener con tu comunidad?
Definitivamente. Me hizo sentir mucho más cómoda hablando de la menopausia y de la experiencia de pérdida que todas tenemos a lo largo de nuestras vidas de diferentes maneras.
¿Puedes hablarme un poco de los síntomas que experimentaste? ¿Te sentías preparada al entrar en la menopausia?
Como soy médico, sabía mucho sobre la menopausia, sobre todo los síntomas y los tratamientos, y aun así no me sentía preparada. Los bochornos eran muy intensos. Incluso en invierno, si me daba el más mínimo rayo de sol en el brazo, me entraba un bochorno. O si bebía una bebida caliente o tomaba sopa. No podía comer nada que estuviera caliente. No podía tolerarlo.
Mi frecuencia cardiaca en reposo era más alta y eso era terrible. Me hacía sentir muy ansiosa y nerviosa todo el tiempo. Recuerdo que se lo conté a mi médico y no me hizo caso porque mis signos vitales estaban dentro de lo normal.
Tenía síntomas vaginales y, aunque me esperaba la sequedad vaginal, también noté que los labios eran más finos. Cuando los tejidos de los labios vaginales no se sienten tan rellenos y confortables, el sexo se vuelve incómodo (el TRH ayudó con esto).
Pregunté a mi médico sobre el reemplazo hormonal y la lactancia y nadie tenía respuestas. Nunca habían hablado de esto con sus pacientes y no lo sabían. Fue desalentador.
Hablemos del TRH: ¿cómo comparas los pros y los contras?
En primer lugar, no todo el mundo puede someterse al TRH. Depende de la salud personal y de los factores de riesgo. También es diferente si no tienes útero (como yo) porque no necesitamos tomar progesterona, así que solo uso un parche de estrógeno. Las personas que tengan útero también deberán tomar progesterona.
También tenía menos de 45 años, y para este rango de edad sabemos que el estrógeno ayuda a mantener la densidad ósea, protege contra la progresión precoz de las enfermedades cardiovasculares y la demencia y minimiza los síntomas.
¿Me pregunto si pasar por este proceso y tomar el TRH te hizo sentir más conectada con tu cuerpo y los signos y síntomas?
Sí, una de las ventajas de hacerse mayor es que conoces mejor tu cuerpo a la hora de notar los síntomas, la satisfacción sexual, entre otros, pero también me encanta no tener el periodo. La verdad es que no lo echo de menos. Y para mí es un alivio no tener que preocuparme por embarazarme sin querer. Hay liberación en ese conocimiento.
¿Qué te gustaría que supiera más gente sobre la menopausia?
Me gustaría que la gente entendiera cómo los síntomas pueden ser tan completos y espero que la gente se sienta cómoda pidiendo tratamiento.
Pero también una gran parte de lo que interiorizamos nos hace pensar que durante la menopausia van a ocurrir cosas muy malas o que de la noche a la mañana todo va a cambiar. Y eso no es necesariamente cierto. Estoy en la mejor forma de mi vida. ¡Corro a la mayor velocidad que he corrido nunca a mis cuarenta y tantos años!
Cómo médico, ¿cuál crees que es la principal idea errónea de la menopausia?
Mucha gente todavía se siente incómoda con el tratamiento de reemplazo hormonal como consecuencia del estudio del Women’s Health Initiative y las advertencias que se aplicaron al TRH. Es muy importante examinar estudios más recientes.
¿Algo más que quieras compartir?
Esto afecta al 50 % de la población. Tenemos que hablar de la menopausia para normalizar esta parte de la vida, comenzando desde temprano.
Pienso en la escuela de mi hija: abordaron la pubertad de una forma muy inclusiva. Todos los estudiantes recibieron información sobre la menstruación, no solo quienes iban a menstruar. Y cuando tuvo su primera menstruación, mi hija se sintió bien cómoda enviando a su padre a la farmacia a comprar productos sanitarios. Esto es tan diferente de cuando yo tenía su edad. Me da esperanzas de que la gente pueda sentirse más cómoda hablando de la transición a la menopausia y de la menopausia y pensando en cómo educamos a las personas para terminar con la vergüenza y el estigma.
No tenemos una clase para que la gente de mediana edad entienda por lo que están pasando sus iguales y tal vez eso es lo que necesitamos. Tenemos que enseñar a todo el mundo qué significa la menopausia, qué aspecto tiene y cómo afecta a nuestra comunidad. Es una cuestión de salud comunitaria.