Si le han practicado una cesárea, es probable que el médico le haya practicado una incisión en la parte inferior del abdomen (cerca de la línea del bikini). Mientras cicatriza, esta línea permanecerá ligeramente elevada, hinchada y de color rosa o rojizo, pero se irá reduciendo con el tiempo a medida que la cicatriz se aplane y cicatrice.
Es posible que experimente algo de entumecimiento, picor o dolor alrededor del lugar de la incisión mientras se recupera. Se trata de una parte normal del proceso de cicatrización. También puede notar cierta inflamación alrededor de la herida, que desaparecerá gradualmente con el tiempo.
Si observa sangre, líquido descolorido o pus, llame inmediatamente a su profesional de la salud. Intente mantener la zona seca y limpia para favorecer la cicatrización y la comodidad.